Urge el apoyo del gobierno federal para terminar la huelga en La Palapa: FSTEG

Salvador Serna

El presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores del Estado de Guerrero (FSTEG), Felipe de Jesús Loyo Malabar, informó que para que se termine la huelga en el hotel La Palapa, ubicado en la zona Dorada, se debe de solicitar el apoyo del gobierno federal porque “tal parece que es una huelga sin fin y los únicos que sufren son los trabajadores”.
Entrevistado en un acto público donde autoridades estatales entregaron apoyo económico a personas desempleadas, el líder sindical indicó que actualmente en la hospedería “hay obreros en edad de jubilación y no pueden montar guardias todos los días y noches, eso debe de terminar porque primero es su salud. Se debe de solicitar la intervención del gobierno federal y también del estatal para darle una pronta solución al conflicto. La prueba es que la autoridad estatal apoya a personas desempleadas, lo cual también se puede hacer con los sindicalizados del hotel”.
Desde marzo de 2011, sindicalizados de la sección 113 de la CTM se mantienen en huelga en el hotel La Palapa debido a la irregular administración del corporativo Opina, cuyos directivos se han mostrado reticentes a establecer una negociación con los abogados de la CTM en cuanto a pagos de salarios atrasados, vacaciones, propinas y salarios caídos al personal de base, cuya mayoría son mujeres de la tercera edad que se desempeñaban como camaristas y afanadoras, las cuales montan guardia en el día.
“El próximo 1 de septiembre la huelga en el hotel La Palapa cumplirá un año y medio. Es necesaria la intervención del gobierno del estado para coadyuvar de manera rápida y eficaz y así solucionar el conflicto”, dijo Loyo Malabar.
Aseguró que si bien es cierto que los derechos de los trabajadores deben de ser preservados, también hay que escuchar las propuestas de solución del patrón demandado, en este caso Corporativo Opina, porque “ellos enfrentan grandes costos en servicios municipales ineficientes, como el suministro de agua, les sale carísima porque la CAPAMA no es equitativa en el cobro y algo similar sucede con el servicio de energía eléctrica de la CFE”.