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Con críticas del PT y PRD al IFE y la defensa del PRI y del PAN, cierra el organismo sus sesiones

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

La violencia, el descrédito del Instituto Federal Electoral (IFE) ante la población y la urgente necesidad de una nueva reforma electoral para evitar la compra del voto y la imposición del ganador por parte de los medios de comunicación electrónicos, marcaron la última sesión del consejo local del organismo en Guerrero.
Durante tres horas y media de sesión, consejeros electorales y representantes de partido expusieron sus interpretaciones respecto de la pasada jornada electoral, en 11 puntos con que contaba el orden del día.
La violencia en la entidad provocó que los asistentes guardaran un minuto de silencio por el asesinato de la capacitadora electoral Guadalupe Villanueva, ultimada la noche del 17 de abril en la comunidad de Monte Alto, en el municipio de San Marcos, en la región de la Costa Chica.
El representante del Partido del Trabajo (PT), Rubén Cayetano García, dedicó su intervención al perredista Concepción Villarreal Mendoza, quien fuera regidor en Cuajinicuilapa, asesinado en su casa el martes pasado.
Un par de consejeros también hicieron mención de que, antes y durante la jornada electoral, hubo rumores de que habría hechos de violencia, y si en algún caso se dieron fueron hechos que no marcaron al proceso electoral en su totalidad.
El petista fue el más incisivo en cuanto al papel del IFE, pues consideró que le “quedó a deber una vez más al pueblo de México, aún no se ha saldado la deuda histórica del 2006 y ahora se le acumula la del 2012”.
En ese tenor, agregó que en México no hay democracia ni está en camino de construcción, sino que en cada elección, quienes detentan el poder político y económico del país han logrado imponer a quien trabajará para ellos “bajo la  indolencia de los integrantes del órgano electoral”.
A su parecer, el IFE ratificó “su complicidad con el poder público, convirtiéndose en un instrumento y salvoconducto de quienes se consideran amos y señores de México”, por lo que puso en tela de juicio la necesidad de su existencia.
Acusó al IFE de que fue parte “de un guion” que quedó al descubierto desde que el diario británico The Guardian revelara una estrategia, planeada desde el 2005, para imponer como presidente de México al priista Enrique Peña Nieto.
Dicha estrategia, recordó, consistió en que el duopolio televisivo de Televisa y Tv Azteca pusieran en la agenda mediática nacional el tema de la inseguridad como prioritario, que después abanderaría el presidenciable del PRI.
En contraparte, se dejaron de lado los temas de pobreza, la corrupción y el desempleo, que son el fundamento de la propuesta del candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, “además de que mediáticamente López Obrador no existiera y si aparecía sería en el rubro más negativo para el telespectador, sería el malo de la película”.
Recordó que parte de esta estrategia consistió en que, durante el proceso electoral, los medios de comunicación dijeran que el perredista no tenía posibilidades de ganar dando, en promedio, 20 puntos de ventaja a Enrique Peña Nieto en las encuestas.
El día de la elección de manera apresurada salió la candidata del PAN a reconocer el triunfo del priista y luego el presidente Felipe Calderón hizo lo propio, recordó.
Tras el recuento, el petista señaló al IFE que en una posición institucional, ya no ciudadana, se resistió a fiscalizar los recursos que utilizó el PRI en casos como la compra masiva del voto a través de la tienda de autoservicio Soriana y el grupo financiero Monex.
“El IFE es deudor de la democracia en México y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, su aval”, cerró.
El representante del PRD, Juan Manuel Hernández Gardea, dijo que “no es la primera vez que órganos electorales favorecen al PRI, sucedió en el Salinato y ahora en los resultados de esta elección. Como ejemplo puso el fraude electoral de 1988, con una supuesta caída del sistema que se cortó cuando el candidato presidencial del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, iba arriba y al regreso del sistema ya estaba abajo en el conteo de votos, con lo que se hizo presidente Carlos Salinas de Gortari.
Consideró que en el pasado proceso electoral se “reeditó el fraude del 2006, con un Instituto Federal Electoral haciendo el papel de defensor oficioso de Enrique Peña Nieto porque desechó cada recurso que se le planteó”.
Vaticinó que con “la imposición” de Enrique Peña Nieto en la Presidencia de la República regresarán las prácticas represivas que se ejercieron durante más de 70 años de gobiernos priistas, entre los que se cuentan las matanzas de 1968 y 1971, además de la desaparición forzada y la ocupación militar de Guerrero en 1970, conocida como la Guerra Sucia.
“Si se materializa la imposición nos esperan hechos represivos que han enlutado a miles de familias y a la izquierda sólo nos queda atrincherarnos en la lucha social para exigir mejores condiciones de vida para los mexicanos”, advirtió.

Peña Nieto ganó, determinan el PRI y el PAN

En su intervención, el representante del PRI ante el consejo local del IFE, Roberto Pastor Reynoso, expuso que no evaluaría el desempeño del IFE y dijo que “México decidió el 1 de julio en una relevante jornada electoral que quería un cambio de rumbo, la gente mayoritariamente eligió al PRI”.
“Con el concurso de los guerrerenses y los partidos políticos, cumplieron con la función a pesar de las amenazas de la violencia en las casillas y eso merece el mayor de los reconocimientos, pues si no hay casillas no hay elecciones. Para el caso de Guerrero, por ser una elección concurrente, entrañaba grandes retos, a pesar de las dificultades los resultados son satisfactorios, aunque en lo local algunos resultados son cuestionables”, expuso.
Recordó que en todas las sesiones hubo acuerdos, quejas y denuncias, pero cada una de ellas fue atendida y se ajustaron al marco normativo y, sin dar explicación, consideró que “la reforma electoral sí debe ser agenda”.
Defendió que “los resultados (el triunfo de Peña Nieto) fue producto de la voluntad ciudadana. En Guerrero 17 casillas fueron abiertas y fueron presentados recursos de inconformidad en 9 distritos electorales, defendimos con la ley en la mano nuestros triunfos, pero siempre con el respeto al voto”.
Desestimó la impugnación de los partidos de izquierda para echar abajo la elección presidencial y dijo que no fructificará, “confío en que el Trife hace su trabajo apegado al marco constitucional, no habrá presión o chantaje que funcione para cambiar la voluntad expresada el 1 de julio”.
“Fue una elección democrática y constitucional, que tendrá como destino final la declaratoria de validez y la declaración de presidente, legítimamente, a Enrique Peña Nieto”, expresó.
El representante del PAN, Eleazin, adelantó que su partido acatará los resultados que dé el Trife respecto de la impugnación de la elección presidencial, pues “como actores políticos tenemos la responsabilidad de avalar el proceso electoral en sus diferentes etapas”.
“El PAN ha manifestado el fortalecimiento a instituciones electorales, hay corresponsabilidad para la democracia. El reconocimiento del PAN es al ciudadano que salió a ejercer su derecho al voto, que a diferencia de otros procesos hubo un considerable número de votantes que decidió el destino del país”, agregó.
Recordó que su partido dio cuenta de “algunas deficiencias pero el IFE pudo garantizar que el día de la elección el ciudadano saliera a votar con las garantías de la ley electoral, sí falta por hacer pero también debemos sumar esfuerzos”.
“No podemos acusar a un órgano electoral del resultado de una elección, como partidos debemos analizar nuestra participación. Al final quien valide será el ciudadano que emitió el voto”, defendió al IFE.
En ese tenor, llamó al PRD, PT y MC que tienen impugnada la elección, pues “los partidos deben reconocer los resultados luego de los recursos que prevé la ley, si no, sería una farsa la democracia que tanto enarbolamos, por eso los llamo a que coadyuvemos para que el próximo proceso sea de mayor altura y mayor nivel”.

Que las televisoras no impongan al próximo presidente

El consejero presidente del IFE local, David Alejandro Delgado Arroyo, recordó que en el proceso electoral se rindieron 226 informes más 40 presentados por comisiones, 15 acuerdos y 12 resoluciones para una elección en donde votó el 60.29 por ciento de la población registrada en el padrón electoral, lo que significa un millón 412 mil 693 ciudadanos.
Luego, pidió al próximo Congreso de la Unión que tome en cuenta la necesidad de una reforma electoral, la cual detalló en 26 puntos, y como número uno planteó “realizar una gran consulta nacional incluyente”.
Pidió “ir más allá de slogans como pedir una ley de partidos, olvidándose que la I del COFIPE se refiere a las instituciones, que no sólo es el IFE sino los partidos políticos, la ley ahí está, hay que ir de la forma al fondo”.
Y exigió a los legisladores “definir si queremos un sistema electoral de cuotas o de fortalecimiento democrático, o más allá del dilema, cómo hacerlos compatibles”.
El resto de los consejeros, con sus matices, se declararon también a favor de una reforma electoral que evite que las televisoras impongan al próximo presidente de la República, y también el cese a la propaganda material que genera montones de basura y afecta la ecología.
Se pidió que no se le carguen todas las irregularidades al IFE, pues al menos en Guerrero los consejeros actuaron apegados a la ley, aunque reconocieron que ésta es insuficiente para el sistema democrático deseable por la ciudadanía en general.
El proceso electoral fue calificado por los consejeros, a unas horas de que el Trife defina al ganador de la Presidencia de la República, como satisfactorio.

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