Desalojan padres de aspirantes de Ayotzinapa a los trabajadores de la SEG en Chilpancingo

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Padres de familia de jóvenes que aspiran a ingresar a la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, mediante el corrimiento de la lista de escalafón, desalojaron a los trabajadores de las oficinas centrales de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) para exigir una solución favorable al conflicto por la inscripción de alumnos de nuevo ingreso.
Reiteraron su rechazo a la inscripción de los “recomendados de la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez”, en referencia a los 26 jóvenes que también exigen un lugar en la matrícula escolar, con base en los criterios de selección de la convocatoria del nuevo ciclo escolar.
Entre las consignas se leían: “No a la imposición  de la SEG, sí al trabajo interno como esencia de un normalismo crítico y analítico”, “los alumnos de Ayotzinapa no están solos”.
En el segundo día de protesta en las oficinas de la SEG, unos 50 padres de familia acompañados de un centenar de jóvenes, llamaron a los trabajadores de oficinas centrales a que se retiraran de las instalaciones porque en unos momentos serían tomadas por los manifestantes; en unos 30 minutos, los cerca de 3 mil trabajadores, abandonaron el lugar.
Un día antes, los manifestantes sólo se instalaron en las puertas de acceso, sin impedir el tránsito de personas o vehículos, para hacer patente a las autoridades su llamado a que autorice al inscripción total de la matrícula escolar, donde sólo están pendientes los 26 espacios.
A partir de las 12:40, los padres y jóvenes cerraron las oficinas y colocaron pancartas donde se leía: “Los padres de familia exigimos el corrimiento del escalafón inmediato, a la SEG para que nuestros hijos reciban clases”.
El vocero de los padres, Esteban Basilio Morales, también demandó de las autoridades respeto para los integrantes del Comité de Alumnos Ricardo Flores Magón y para la semana de adaptación a la que se somete a los aspirantes antes de la inscripción de los alumnos.
Insistió, en que la semana de “adaptación” no es una práctica nueva en la Normal, tiene más de 20 años y ha permitido confirmar, por medio de trabajo comunitario, la convicción social y el compromiso de los aspirantes.
Sobre el diálogo con las autoridades, informó que sí han tenido encuentros, pero se no han planteado soluciones, por lo tanto exigió a la SEG resolver este conflicto porque transcurre la cuarta semana de clases, y sus hijos no han comenzado a estudiar.
Recordó que la falta de soluciones efectivas, fue lo que originó el desenlace trágico del 12 de diciembre, donde fueron asesinados a balazos dos estudiantes normalistas en un desalojo policiaco.