Jorge Camacho Peñaloza

Sexagésima Legislatura

A un reino conquistado le es lícito reconquistarse.
Morelos

Un nuevo capítulo está por terminar en la vida política del país y del estado, se renueva la Presidencia de la República, el Congreso de la Unión, poderes públicos estatales y municipales. En Guerrero el día de ayer iniciamos el periodo de la Sexagésima Legislatura del estado de la que tengo el honor de formar parte como diputado del PAN, finalmente se impuso la legalidad.
Para nosotros el día de ayer inició un reto, una nueva oportunidad de enderezar el rumbo del estado, los actores políticos que llegamos a cargos de responsabilidad otorgada por la ciudadanía, sea como alcaldes o como legisladores, tenemos la obligación, en primer lugar, de pensar y ocuparnos en el estado de Guerrero, en sus problemas y oportunidades de desarrollo, las soluciones y mecanismos para elevar el bienestar de su población, sea con inversiones, programas, políticas públicas o leyes, generando sinergias, movimientos políticos, económicos, culturales o sociales, lo que sea siempre en el marco de la ley.
Guerrero, y en general el país, atraviesa por una etapa difícil por la inseguridad pública, el crimen organizado, la pobreza, insuficientes empleos, desarticulación política y social, ante la cual quienes tenemos una responsabilidad pública no podemos seguir actuando siempre, administrando los recursos, facultades o conflictos, limitándonos sólo a parecer más que a ser para lo que nos eligió la ciudadanía, es decir, no podemos seguir sólo simulando ser legisladores, alcaldes o servidores públicos, dejando cientos de iniciativas del ley para el recuerdo, obras tiradas y servicios públicos o administraciones públicas derrumbadas.
El haber tomado protesta al mandato ciudadano en el histórico día de ayer 13 de septiembre, fecha cuando en 1813 reunidos en la iglesia de la Asunción en Chilpancingo sesionó el Primer Congreso de Anáhuac con los primeros diputados de la Nación para dar lectura a los Sentimientos de la Nación, como integrante de la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional tiene un elevado simbolismo, es una oportunidad que tenemos los guerrerenses, como legítimos herederos del nacimiento del parlamentarismo mexicano, de armonizar no sólo los esfuerzos legislativos y de los poderes públicos estatales, sino de volver a poner a tiempo a Guerrero, a los tiempos de la historia, del presente y del futuro de nuestro estado.
Tomar protesta en esta fecha como legislador además de un compromiso con la ciudadanía y con el pueblo soberano de Guerrero, con los congresistas de aquel 13 de septiembre de 1813, pero sobre todo es un honroso compromiso con los Sentimientos de la Nación que dieron identidad a nuestra unión como nación independiente.
Vamos a sumarnos a todo lo que ponga por encima de cualquier interés los anhelos de los guerrerenses, el desarrollo del estado, su avance democrático, el bienestar de las familias surianas, la consolidación de las instituciones, la cultura de la legalidad y el irrestricto respeto y vigencia de las leyes.
Pugnaremos por integrar una sola representación de la soberanía Guerrerense más allá de posicionamientos partidistas, insistiré que más que a nuestros partidos, en realidad representamos a los ciudadanos, en que la máxima autoridad, la mandataria verdadera mandataria que habrá de señalarnos nuestra actuación en la Sexagésima Legislatura es la soberanía guerrerense que emana no de los postulados de los partidos sino de lo más profundo del sentir de los guerrerenses.
Los guerrerenses no nos mandaron al Congreso a generar pleitos estériles, a simular ni a gozar de privilegios, nos mandaron a trabajar, pues por eso nos pagan. Estamos listos para construir una agenda legislativa creativa, innovadora, pertinente y necesaria.
Guerrero no está bien, ser históricamente de los estados más pobres, atrasados y marginados de la República no es indicador de que estamos bien, necesitamos enderezar el rumbo, lo tenemos que hacer desde las instituciones y no desde caprichosos voluntarismos de los políticos y servidores públicos.
Guerrero necesita de un verdadero sistema de pesos y contrapesos en las instituciones, poderes públicos y niveles de gobierno, para que ningún individuo, grupúsculo o partido las maneje a su antojo y libre albedrío, en las democracias las instituciones se manejan por la ley.
Guerrero necesita vigorizar su vida institucional, alejarse de las decisiones discrecionales de los hombres y mujeres del poder, ser guiado por las instituciones y la ley, esa será nuestra principal directriz como integrantes de esta legislatura.
Vuela vuela palomita: Y ve y dile a aquellos que hace 199 años sesionaron como primeros representantes de la soberanía de la nación, que tendré como principal referente de mi labor como legislador a los Sentimientos de la Nación.