Paran más de 200 maestros de 20 primarias ante un rebrote de violencia en Zapata y Renacimiento

Aurora Harrison

Ante el rebrote de secuestros y extorsiones, unos 280 maestros de 20 escuelas primarias de la zona 36 y 35, del sector cuatro de Ciudad Renacimiento, pararon labores para exigir a las autoridades cumplir los acuerdos de hace un año; aseguraron la Operación Guerrero Seguro los abandonó y los botones de emergencia no sirven, porque se dejó de pagar el teléfono.
Los docentes manifestaron que el pasado jueves hubo el intento de secuestro de un profesor a la hora de entrada de los estudiantes, que inclusive padres de familia y alumnos se dieron cuenta del hecho; y otro caso que sucedió ese mismo día fue un secuestro exprés.
Desde temprano, los docentes se reunieron frente a la Delegación de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca, hasta donde llegó el secretario de organización del SNTE, Martín Radilla Mendiola, a quien le dijeron que los policías no hacen rondines, y sólo se presentan por la firma.
“Estamos desprotegidos, no hay seguridad y no hay tranquilidad”, dijo una maestra, quien insistió en que los maestros siguen con miedo ante el intento de secuestro del maestro, hecho que ocurrió el pasado jueves, afuera de la primaria Francisco Sarabia, ubicada en la colonia Renacimiento.
En la zona 35 son 12 primarias las que paran con 154 maestros, mientras que en la zona 36 son ocho las escuelas y 126 maestros, son un aproximado de tres mil estudiantes los afectados que la suspensión de clases, hasta que las autoridades cumplan con los acuerdos firmados el año pasado.
La secretaria general de la zona 35, Beatriz Cano Rojas –quién participó en el movimiento el año pasado, que duró más de dos meses– declaró: “Es lamentable decir que a un año de que se diera el movimiento, hoy tengamos que volver a parar labores para que el gobernador nos escuche”.
Agregó que los maestros están molestos porque las autoridades “nos tomaron el pelo”, Guerrero Seguro nada más estuvo los tres primeros meses y la inseguridad sigue, aunque no con la misma intensidad que el movimiento del año pasado, pero se siguen dando casos.
“La razón por la que paramos es el secuestro en la zona 36 y el intento de secuestro del hijo de la supervisora, aunque tenemos llamadas de extorsión, robo de carros y amenazas, pero no habíamos hecho caso a todo eso”, declaró la secretaria general de la zona escolar 35.
Aseguró que no hay vigilancia por parte de Guerrero Seguro, que las mesas de trabajo para evaluar la estrategia de seguridad se suspendieron desde enero, “todo se relajó, las autoridades pensaron que ya estábamos protegidos, sin embargo siguen dándose los casos”.
Cano Rojas dijo que este lunes se reunieron los supervisores y secretarios con la delegada de los servicios educativos, María Edith Zurita, y estuvieron presentes la zona 34 y 32 –que comprende las escuelas de la colonia Zapata–, quedaron en que se iban a sumar, y esperan que hoy lo hagan.
“Zurita Petatán estuvo en el movimiento pasado y en la reunión que tuvimos nos da una respuesta que nos desmoraliza, porque nos dice que paremos en casa, y nos parece que no es una respuesta que debería de darnos, cuando ella sabe la peligrosidad de los hechos”, puntualizó.
Por su parte, el secretario general de la zona 36, Bonifacio Sandoval, dijo que el único punto por el cual las ocho escuelas de su zona pararon labores es por la inseguridad, porque están afectando al gremio y no hay las condiciones para poder trabajar de manera tranquila.
“Creo que relajación es una palabra suave, hubo abandono total, todo lo que se había ganado se tiró por la borda y no hay nada”, declaró el profesor, quien reprochó a las autoridades que sepan que es zona conflictiva por la inseguridad y no hagan nada, “los policías nada más van por la firma”.
Explicó que hay rondines pero en la avenida principal, es decir el bulevar Vicente Guerrero; dijo que los botones de emergencia no sirven, y que los teléfonos que se instalaron se dejaron de pagar, y que sólo hubo vigilancia permanente los primeros tres meses y luego desapareció.

Revisar los acuerdos firmados: SNTE

El secretario de organización seis de la sección 14 del SNTE, Martín Radilla Mendiola, declaró que hay temor de los maestros por este rebrote de inseguridad hacia el magisterio, “nosotros vamos a pedir que se implementen las acciones, para dar seguridad en los centros de trabajo”.
Abundó que ya tiene conocimiento de los hechos el secretario general del SNTE, José Hilario Ruiz Estrada, así como de la suspensión de labores en las 20 escuelas, porque los docentes reclaman que Guerrero Seguro aparentemente relajó sus estrategias sigue la inseguridad.
“Queremos que se haga una revisión de los acuerdos que se firmaron con el gobernador el año pasado, que los botones funcionen, las cámaras y que se implementen otras medidas de seguridad, para que se garantice el libre tránsito”, puntualizó el secretario de organización.
En declaraciones vía telefónica, la delegada de los Servicios Educativos Acapulco-Coyuca, María Edith Zurita Petatán, declaró que desde el día en que sucedieron los hechos, se informó a las autoridades correspondientes para que dieran atención a la denuncia de los maestros.
“Los compañeros piden que se retomen los rondines, retenes y la vigilancia de patrullas de todas las instituciones educativas en la zona 36, informan que secuestraron a un compañero y en la 35 intentaron llevarse a otro compañero, porque parece que hay un rebrote de amenazas”, dijo.
La funcionaria estatal admitió que sí se relajó la vigilancia y por esa razón se hizo una solicitud de una reunión urgente con la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, y el secretario de Gobierno, Humberto Salgado, para darle una solución a los maestros que pararon por la inseguridad.
El año pasado, el 24 de agosto, maestros de primarias de Ciudad Renacimiento y Emiliano Zapata pararon labores por amenazas de extorsión, secuestro y robo de vehículos; durante más de dos meses los docentes suspendieron actividades e inclusive realizaron cinco marchas.