Está desaparecido el testigo que señaló a federales del asesinato de los normalistas

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

Desde el primero de septiembre está desaparecido el testigo protegido de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Jaime Galván Rodríguez, El Diablo, quien declaró que fueron elementos de la Policía Federal (PF) los que asesinaron a los estudiantes de la normal de Ayotzinapa en la protesta del 12 de diciembre de 2011.
De acuerdo con versiones oficiales, Galván Rodríguez fue levantado de su casa, que se localiza cerca de la gasolinería Eva II, justo en el lugar de donde fueron desalojados a balazos estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa y donde fueron asesinados los jóvenes Gabriel Echeverría de Jesús y Alexis Herrera Pino.
Por esos hechos también murió el empleado de la gasolinería Gonzalo Rivas Cámara, luego de las lesiones que sufrió cuando intentó apagar una bomba expendedora que fue incendiada por dos personas encapuchadas.
Fuentes de la PGJE informaron que el ahora desaparecido contaba con una escolta oficial y que incluso se le otorgó seguridad a su esposa, pero a ambos se les retiró el resguardo sin explicación de la Procuraduría.
El levantón ocurrió en su casa de madera, que se ubica al sur de la ciudad, justo en las inmediaciones de la Autopista del Sol en donde también trabaja en un taller mecánico.
La fuente informó que la esposa lleva una semana buscando a Gal-ván Rodríguez en hospitales, ba-randillas y en el Servicio Médico Forense (Semefo), pero no ha dado con su paradero.
Ayer surgió la versión de que había sido brutalmente golpeado y después hospitalizado, y que mu-rió, lo cual no se pudo confirmar.
En las instalaciones del Semefo se preguntó por él pero ahí informaron que no había nadie de sus características o su nombre.
Mientras, en el lugar se observó a la escolta personal del que fuera procurador de justicia cuando sucedió el desalojo, Alberto López Rosas, quienes acudieron para preguntar sobre Galván Rodríguez.
López Rosas sostuvo desde el principio que fueron efectivos de la Policía Federal quienes ultimaron a los dos estudiantes de Ayotzinapa, y su versión fue corroborada por El Diablo, pero la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la Procuraduría General de la República (PGR) y la PGJE señalaron a dos policías ministeriales del estado como los autores materiales.
Por eso están presos Ismael Matadama Salinas y Rey David Cortés Flores, acusados de ser quienes dispararon y asesinaron a los dos jóvenes de Ayotzinapa.