Sacan de nómina a 13 de 22 maestros de una secundaria en Mazatlán, denuncian

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El dirigente municipal del PRD, Julio César Aguirre Méndez, quien también es subdirector de la secundaria Gerardo Rafael Catalán Calvo, de la población de Mazatlán, denunció que hace dos quincenas sacaron de la nómina a 13 trabajadores de ese plantel, por intrigas de vecinos de la localidad que trabajan en la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) y que están en contubernio con el director Benjamín Adame Pereyra para aprovechar los espacios que se generen en esta escuela.
Luego de una reunión entre los maestros afectados con funcionarios de la Subsecretaría de Educación Básica, Aguirre Méndez exigió la intervención de la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, en el conflicto que tiene más diez años por la intervención constante de padres de familia influenciados por los trabajadores de la SEG, sin atención de las autoridades.
El político explicó que cuando concluyó su periodo como senador de la República, solicitó su regreso a su plaza docente en la comunidad de Mazatlán, que se encuentra a unos 30 minutos de Chilpancingo, pero desde hace 20 días que se presentó a laborar, “las autoridades no habían tenido la capacidad de remover a la persona que se encontraba en su lugar de manera interina”.
De acuerdo con la semblanza de Aguirre Méndez, cuando fue senador suplente trabajó de 1984 a 1996 en la secundaria Gerardo Rafael Catalán Calvo, después ocupó algunos puestos en la estructura de la SEG y luego ocupó otros cargos públicos.
Afuera de las oficinas de la Subsecretaría, el subdirector denunció que “abonando a la confrontación de maestros y padres de familia”, la SEG sacó de nómina hace dos quincenas a 13 docentes de 22 que hay en la escuela, porque un padre o madre dice que hay que levantar actas de abandono de empleo y, “para tranquilizar ánimos, la directora se sumó a esta demanda”.
Aguirre dijo que en 20 días en la escuela lo único que ha visto es trabajo, pero si un maestro falta por enfermedad, los padres comienzan a acusarlos “de flojos y faltistas”, y a la fecha, dijo, exigen la remoción de toda la plantilla; “los padres quieren imponer su ley en la escuela y les dije que nunca voy a permitir que se metan en cuestiones laborales”.
Asimismo, aseguró que los padres de familia que trabajan en la SEG hicieron una mafia con el director de Secundarias, para provocar una una serie de conflictos porque saben que la escuela “genera horas, espacios directivos”.