Chivas falla un penalti de último minuto y empata 0-0 con Pumas

Ramón Estrada / Agencia Reforma

Guadalajara

Luis Pérez pudo evitar el “clásico” desenlace de los Chivas-Pumas, pero en la compensación del segundo tiempo falló un penal que dejó un sabor de más de lo mismo: 14 empates en los últimos 16 juegos, el Rebaño no cae en casa ante los felinos desde hace 30 años, y los rojiblancos siguen sin ganar en el Estadio Omnilife en lo que va del torneo.
El 0-0 refleja cierta justicia, luego de que el árbitro Mauricio Morales decretara penal una dudosa falta sobre Érick Torres, quien exageró en la caída. Además, el mismo silbante no señaló una clara pena máxima de Luis Michel sobre Martín Bravo, que pudo costarle la tarjeta roja al portero del Guadalajara.
Lo rescatable es que el Rebaño ligó tres partidos sin perder, mientras los felinos de Mario Carrillo mostraron una evidente mejoría respecto al encuentro que perdieron el domingo anterior en casa ante el San Luis.
El cuadro universitario contó con claras ocasiones de gol que no pudo concretar.
El delantero argentino Emanuel Villa tuvo para marcar 2 veces, ambas dentro del área, pero voló sus disparos.
Al 72’, el Tito quedó solo y plantado frente a la portería, con Luis Michel ya vencido, pero definió por encima del travesaño, luego de hacer contacto con la espinilla.
Después, también con el portero sin forma de detenerlo y en el área chica, el argentino punteó el balón por encima del travesaño.
El técnico rojiblanco, John van’t Schip, quien ayer le dio su primera oportunidad como titular al novato Luis Morales, quiso ser agresivo desde el arranque con Rafael Márquez Lugo como extremo izquierdo y el Cubo Torres como eje de ataque, tras las ausencias del lesionado Marco Fabián, y el suspendido Xavier Báez, quienes vieron el juego desde un palco.
Jorge Enríquez, en su función de volante de contención, jugó en plan de “todo terreno” y fue muy peligroso; sacó dos remates que pudieron ser gol, uno con la cabeza, al 24’, y otro con un bombazo de media vuelta, al 77’.
El partido fue peleado, pero agradable en general, con Javier Cortés buscando a Martín Bravo.
Para el segundo lapso, Pérez entró por Márquez Lugo, quien fue combativo, pero debió salir por una lesión en el descanso.
Ambos equipos tuvieron opciones para para ganar el juego, pero ninguna tan clara como la del penal de Lucho.
El silbatazo final desató el abucheo, pero para recriminar el fallo del mediocampista rojiblanco, porque en general, el de ayer fue un buen juego, al que sólo faltó el gol.