Sin señalamientos ni policías que dirijan la circulación, las obras del Acabús, se quejan

Mariana Labastida

Sin señalamientos ni policías viales para orientar a los conductores se encuentran los trabajos del proyecto del Acabús en las avenidas Costera y Cuauhtémoc, lo que ocasiona que el tráfico sea lento en ambas vías.
Para los trabajadores del transporte público las obras han significado un ingreso menor debido a que dan menos vueltas en su ruta a las que hacen normalmente.
En el tramo de la avenida Costera, que va de la calle Teniente José Azueta a la playa de Caleta, los conductores tardan unos 40 minutos en la hora de mayor afluencia y en las de menor tránsito se recorre en 20 minutos; en esa zona no se observó a ningún policía vial.
Con excepción de las vallas y cubos de plástico naranja no hay otra señalización que indique a los automovilistas dónde se reducen los carriles a uno que es habilitado en doble sentido, además de no haber policías viales para dirigir el tránsito.
Conductores de camiones urbanos expusieron que debido a los trabajos, que creen que traerán beneficios a futuro, han reducido sus ingresos porque antes de las obras en su turno daban entre cinco o seis vueltas pero actualmente hacen de tres a cuatro, por lo que después de deducir el combustible y la cuenta que entregan les quedan de 150 a 200 pesos diarios, cuando antes ganaban hasta 350 pesos al día.
En la esquina de la calle Teniente José Azueta no hay agentes de Tránsito, tampoco en el entronque para entrar a la playa Manzanillo, donde los trabajadores son los que guían la circulación para la entrada y salida de vehículos, lo cual también hace lento el tráfico y genera filas en ambos sentidos en el carril habilitado para circular.
A lo largo del tramo de la Costera, donde se trabaja, se pueden observar partes en las que ya se colocó concreto hidráulico, otras en las que se excava para el cambio de la tubería de agua potable y drenaje, mientras que en otros se instalan los tubos para sustituir a los anteriores que están desgastados, a fin de asegurar que no se tenga que abrir el concreto por una fuga en la red hidráulica.
Algunos conductores y habitantes de esa zona expusieron que sólo ven a policías viales a las horas pico “cuando pueden pedir mordidas”.
En el tramo de la avenida Cuauhtémoc tampoco hay policías viales, siendo el punto donde se congestiona el tránsito en el entronque con la calle Doctor Ignacio Chávez, donde en las tardes se ha visto a los trabajadores dirigiendo la circulación principalmente porque se prohibió el paso hacía la avenida Universidad y sólo se tiene permitido en sentido contrario, cuando anteriormente era de ambos.
“Las calles están feas, no se puede circular bien, están todas dañadas, ojalá que se termine la obra antes de diciembre”, dijo el taxista Arturo Hernández, quien se quejó porque al igual que los camiones urbanos que tienen las rutas, ellos que no la tienen tardan más por cada dejada o deben dar más vueltas.
“A ver cuándo terminan, no se sabe cuándo se va a terminar y espero que cuando ya esté todo pavimentado no haya el problema con los baches”, indicó el señor Manuel Cárdenas.
El tráfico también se ve afectado por los trabajos de bacheo en la avenida Cuauhtémoc, pues reduce los carriles, además de que no se puede circular por las laterales que están inconclusas debido a que sólo se ha colocado concreto hidráulico en partes, pero no en los entronques con las calles secundarias.