Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Solicitan atención psicológica para los seis jóvenes de la UAG arraigados por la PGR

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

Los jóvenes detenidos en Coyuca de Catalán por la Policía Federal Preventiva (PFP) el 13 de septiembre, muestran señales de depresión luego de 17 días, informó el padre de uno de ellos, el trabajador de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) Jesús Alarcón Juárez.
Los estudiantes de la Unidad Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UAG, Alan Francisco Alarcón García, Ricardo Muñoz Arzate, Jesús Antonio Moreno Román, Juan Andraca Escalante, Lucio Sandoval Molina y José Luis Almonte Díaz fueron detenidos y culpados de portar armas de uso exclusivo del Ejército, drogas y de haber participado en la ejecución de 16 personas, pocos días antes de que fueron detenidos.
Los jóvenes están en la casa de arraigo de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) en el Distrito Federal y sus familiares los esperan afuera, con la esperanza de que sean liberados.
El padre de uno de ellos, Jesús Alarcón relató que ha logrado ver a su hijo de 20 años de manera constante, pues se lo han permitido en la dependencia de la Procuraduría General de la República (PGR).
La apariencia física de los jóvenes detenidos, dijo, es saludable “a simple vista se ven bien, hace 15 días tuvieron atención médica y no están mal de salud, su problema es que todos están deprimidos”.
“A todos los jóvenes se les ve muy tristes, es algo muy grave porque esto los podría marcar toda su vida, lo que les hizo la Policía Federal es un golpe sicológico del que difícilmente van a poder recuperarse”, agregó.
Acusó a los policías federales que los detuvieron de que les sembraron armas y falsearon la información que tenían al momento de detener a los seis jóvenes, por lo que exigió a la corporación que investigue cómo trabajan.
El daño directo, dijo, es para los jóvenes detenidos, pero detrás de ellos hay familias enteras que sufren las consecuencias de la detención “los familiares estamos muy preocupados, no dormimos, no comemos, la mayoría se la pasa llorando”.
En entrevista telefónica desde la casa de arraigo, pidió “la intervención de sicólogos que puedan ayudar a los muchachos, porque se les ve muy mal”.
“Mi hijo está tronado, apenas tiene 20 años y se ha dedicado a estudiar, es inocente como todos sus compañeros, esto es una artimaña de la Policía Federal que nos está destruyendo, no sé cómo explicártelo, no tengo palabras para describirlo compa’ necesitamos ayuda”, soltó, ya al borde del llanto.
En cuanto a la ayuda institucional que han recibido los detenidos, recordó que el gobernador Ángel Aguirre Rivero intervino ante la PGR y la PFP, para que realicen un proceso apegado a derecho.
Sobre el caso, en ocasiones anteriores el diputado federal y coordinador de los diputados federales del PRD, Catalino Duarte Ortuño informó que una de las armas con la que los jóvenes fueron presentados, una pistola calibre .22, fue extraída por policías federales de la casa de un campesino, apenas una semana antes de que aprehendieran a los estudiantes.

468 ad