Con loas a Peña Nieto comienza Mario Moreno en Chilpancingo su segundo periodo

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

Mario Moreno Arcos tomó protesta como nuevo alcalde de Chilpancingo, y con el gobernador Ángel Aguirre Rivero prometió que durante esta administración se resolverá el problema de la falta de agua y se hará más eficiente el transporte.
El presidente electo Enrique Peña Nieto y el ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer tuvieron especial mención en el discurso de Moreno Arcos y del gobernador, el primero porque se comprometió en campaña a resolver el desabasto de agua de la capital y el segundo porque inició la construcción del encauzamiento del río Huacapa, además de que construyó el mayor centro deportivo de la capital del estado.
Durante la sesión de cabildo que se celebró en un repleto auditorio Sentimientos de la Nación, el alcalde de Chilpancingo se dijo satisfecho de la administración que le entregaba, que comenzó Héctor Astudillo Flores pero terminó Tulio Pérez Calvo, ambos priistas.
Moreno Arcos pidió a los chilpancinguenses, en general, que lo ayuden a resolver los problemas de la capital del estado.
“Quiero refrendar el compromiso que voy a honrar con mis actos… ayúdenme en forma cercana y activa”, dijo, lo que le valió los aplausos de los asistentes.
Recordó que esta será la segunda ocasión en que es alcalde de Chilpancingo, por lo que se dijo seguro de que conoce los problemas de la ciudad y podrá resolverlos, y como eje de su gobierno prometió austeridad, disciplina financiera y rendición de cuentas.
Mencionó al presidente electo Enrique Peña Nieto, de quien dijo ha “extendido su mano generosa” y auguró una sana y coordinada relación institucional.
Recordó a los héroes de la patria Vicente Guerrero y Juan Álvarez, y que fue en Chilpancingo donde se leyeron los Sentimientos de la Nación de José María Morelos y Pavón, que es considerada la primera Constitución del país.
El próximo año, el documento cumplirá 200 años de que fue promulgado, al igual que la instalación del Primer Congreso de Anáhuac que también se hizo en Chilpancingo y convirtió a esta ciudad en la primera capital del país.
El alcalde dijo que la ciudad debe renovarse y lo hará, ya que cuenta con el respaldo del presidente electo de la República, “ahora sí seremos escuchados. Tengo plena certeza de que está la voluntad de Enrique Peña Nieto, presidente electo de México”, comentario que le valió los aplausos del público asistente.
“Refrendo a Enrique Peña Nieto la confianza de que será el artífice de la transformación del país, confiamos en su capacidad y sobre todo, confiamos en su liderazgo”, manifestó.
Después se dirigió al gobernador del PRD, Ángel Aguirre Rivero, lo miró fijamente y dijo: “me apego a su compromiso, por el proyecto común de lo que es Chilpancingo”, mientras el gobernador lo observaba, su codo derecho sobe la mesa que tenía enfrente, su mentón sobre la palma abierta de su mano.
El alcalde le dijo: “sé que contaré siempre con todo su apoyo”, por lo que los asistentes rompieron en aplausos, y el gobernador hizo algunas anotaciones en una hoja.
Moreno Arcos pidió “colaboración en los actos del bicentenario, tenemos que reconocernos como la primera capital del México independiente”.
A su vez, le pidió que done el Palacio de la Cultura, edificio que se encuentra a un lado del Palacio Municipal, al Ayuntamiento para que se cambien las instalaciones y en esa petición los aplausos se escucharon más fuertes.
Con el nuevo edificio dijo que tendría más cobertura y seguridad para los trabajadores.
“Amigo gobernador, sé que usted tiene proyectos para Chilpancingo que de seguro serán de gran impacto y que nos permitirán transformar nuestro municipio, trabajemos juntos”, pidió, y los asistentes aplaudieron aún más fuerte”.
De los asistentes, agradeció al ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer, a los cuatro senadores que asistieron, Magdalena Palafox Gutiérrez, Eviel Pérez Magaña, Sofío Ramírez Hernández y el también ex gobernador René Juárez Cisneros.
Saludó también al comandante de la novena región militar, general Guillermo Moreno Serrano, al comandante de la 35 Zona Militar, Juan Manuel Rico Gámez, a monseñor Alejo Zavala Castro, al secretario general de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, y al diputado local y ex alcalde de Chilpancingo, Héctor Astudillo Flores. Cuando mencionó a este último la gente gritó y aplaudió intensamente.
Y entonces, el alcalde lanzó una promesa: “no los voy a defraudar, voy a hacer las cosas bien”.
“Asumiré el papel que me corresponde y el compromiso con los chilpancinguenses, mi paso es efímero, pero habrá un cambio. Con su ayuda voy a trabajar para llevar a Chilpancingo a ser una de las grandes ciudades del país”, agregó.
Y en claro mensaje al gobernador, señaló: “le apuesto a la fuerza de la política, no a la política de la fuerza. No será la confrontación el signo de mi gobierno, sino la práctica permanente del diálogo”.

Edificio, metrobús, agua…,
promete Aguirre Rivero

En su intervención, el gobernador Ángel Aguirre Rivero dijo que el Ayuntamiento de Chilpancingo es “de los pocos municipios que entrega cuentas claras y ordenadas, además de que tiene mucha obra a nivel municipal”.
Y para Moreno Arcos, dijo, “ustedes los que vienen tienen un gran reto, tenemos que dar el paso definitivo para dignificar a Chilpancingo, Rubén Figueroa tuvo visión e instauró el programa del fertilizante, construyó el (centro deportivo) CREA y empezó con el encauzamiento del río Huacapa. Muchas gracias”.
Repasó a la administración de Zeferino Torreblanca Galindo y expresó: “nunca pude entender por qué este auditorio (Sentimientos de la Nación) se quedó inconcluso”.
Saludó al ex dirigente estatal del PRI, Efrén Leyva Acevedo, quien operó para que el candidato del PRI a gobernador fuera Manuel Añorve Baños y no él.
Entonces habló del alcalde de Chilpancingo, con quien se le vincula políticamente porque operó para que en la pasada legislatura un grupo de diputados del PRI formara una fracción independiente, conocida como la fracción aguirrista.
En su discurso, Aguirre Rivero dijo “a Mario lo conozco, sé de su trabajo y sé cómo entiende la política, nunca cae en actitudes prepotentes. Sabe respetar la pluralidad, porque es el alcalde de todos los chilpanchingueños”.
Para dejar claro que tiene un compromiso con la capital del estado, Aguirre Rivero dijo que no acudió a su tierra natal, Ometepec, a la toma de protesta del alcalde, porque prefirió quedarse en Chilpancingo, “porque soy chilpancinguense nacido en Ometepec, y no voy a rehuir a lo que me ha planteado Mario, para mí es beneplácito y emoción, vamos a trabajar como un solo ente. Con Mario tenemos muchas afinidades”.
Así, se comprometió a que donará el Palacio de la Cultura para que sea el nuevo Ayuntamiento, pero a cambio de que el Palacio Municipal quede a cargo del gobierno del estado, en donde operaría el Instituto Guerrerense de la Cultura (IGC).
“Haremos un gimnasio más grande porque los deportistas ahorita no caben en el CREA. Haremos el rescate del centro histórico de Chilpancingo. A pesar de los transportistas, arrancaremos el metrobús en Chilpancingo que se conoce como el Chilpobús, lo arrancaremos en los próximos días”, prometió.
Del agua potable recordó que “es la asignatura pendiente de muchos Ayuntamientos y requiere de muchos recursos. Pero ya tenemos 200 millones de pesos para invertir en un nuevo proyecto, no haremos nada si no es con el aval del Ayuntamiento, así, si nos equivocamos juntos, o compartiremos el éxito de una obra, de las más deseadas para la capital”.
También prometió que en seis meses inaugurará una nueva plaza de toros para Chilpancingo, “pero tenemos que cambiar la feria, no puede seguir así. Esperamos que Mario nos ayude con los terrenos, a localizarlos para que los compremos. Ahí va a quedar la plaza de toros, pero las instalaciones de la feria estarán en otro lado”.
“Sé que este ayuntamiento dejará profunda huella, siempre tendrán el respaldo y la solidaridad del gobernador, que viva Chilpancingo, que viva Guerrero”, cerró.