Piden los alcaldes de Cutzamala y Azoyú la intervención de la Contraloría y la Auditoría

Rosalba Ramírez

Chilpancingo

Los alcaldes de Cutzamala y Azoyú, Isidro Duarte Cabrera y Luis Justo Bautista, respectivamente, solicitaron ayer la intervención de la Contraloría General del Estado y la Auditoría General del Estado (AGE) para investigar y pedir cuentas a sus antecesores, pues dejaron los ayuntamientos sin recursos.
En visitas por separado, los alcaldes de Cutzamala y Azoyú llegaron a la contraloría para denunciar irregularidades tales como falta de recursos y carencia de documentación de las tesorerías.
Duarte Cabrera denunció que en su municipio la administración pasada se llevó hasta los aparatos del aire acondicionado, “no nos dejó ni un lapicero, no nos quiso entregar nada”, dijo el alcalde de su antecesor Francisco Estrada Campos.
El perredista entregó al contralor Julio Cesar Hernández Martínez un oficio de información en el que detalla cómo encontró el ayuntamiento, y solicitó una copia certificada de los inmuebles que el ayuntamiento reportó tener en el periodo del 31 de diciembre del 2011 al 30 de junio, que son los mismos que debió entregar al nuevo cabildo.
Ante la falta de documentación en sus oficinas, pidió a la dependencia también copia certificada de la plantilla del personal y una auditoría a la administración de Estrada Campos.
En el paquete de documentos incluyó el acta circunstanciada que levantó el notario público número 2 del distrito notarial de Mina, Ceferino Cruz Lagunas, el 30 de septiembre, tras no lograr concretar la entrega-recepción y encontrar varias irregularidades en las instalaciones del ayuntamiento.
Los adeudos en Cutzamala son parecidos a los de otros ayuntamientos, adeuda un millón 750 mil pesos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por lo que hasta el momento no hay alumbrado público en la cabecera municipal.
Son aproximadamente 80 los laudos laborales que debe enfrentar, que representan entre 20 y 30 millones de pesos, consideró el presidente municipal, y dijo que buscará conciliar con los trabajadores, porque afirmó que el municipio no puede pagar.
El parque vehicular también está en malas condiciones, por lo que se tendrá que renovar, y entre patrullas y carros de basura se necesitarán por lo menos 10 unidades, dijo.
Únicamente en alumbrado público y bienes inmuebles se necesitan por lo menos 7 millones de pesos, consideró el edil.
En el caso de Azoyú, el alcalde Luis Justo relató el mismo escenario: un ayuntamiento sin recursos, sin documentación, sin parque vehicular y con adeudos.
La principal preocupación del alcalde priista, dijo, es que no tiene información financiera ni administrativa en el ayuntamiento, por lo que no sabe qué hacer.
Consideró que lo único seguro en la administración que inició, es que no tiene “ni un solo peso”, y que hay obras inconclusas de las cuales no puede hablar porque no sabe cuánto dinero se destino para ellas y cuánto fue ejercido, pues esos datos los conocerá hasta que la Contraloría y la Auditoría General del Estado (AGE) le respondan a las solicitudes de información financiera y administrativas que entregó este miércoles.
Dijo que su antecesor perredista Omar Justo Vargas dejó un parque vehicular inservible, entre ellos un camión de basura, dos patrullas en mal estado en la comandancia de policía, y faltan municiones y cartuchos para las armas.
Luis Justo entregó a la Contraloría y a la AGE solicitudes de intervención e información, porque explicó que ni siquiera encontró con qué comprobar el desfalco y presentar una denuncia.