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Envía Ayotzinapa a 140 normalistas para respaldar las protestas por la represión en Michoacán

Lourdes Chávez / Anarsis Pacheco

 

Chilpancingo

 

La Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa envió el lunes a 140 alumnos a respaldar la movilización de los normalistas de Tiripetío, Cherán y Arteaga en Michoacán, tras el desalojo policiaco en aquella entidad, informó el dirigente estudiantil Diego Castro Domínguez, quien denunció que allá continúa el hostigamiento del gobierno estatal a los estudiantes.

Ante esta situación, informó en conferencia de prensa que están convocando a las organizaciones sociales y estudiantes a analizar qué tipo de acciones de presión van a emprender en Guerrero, para exigir el cese de la represión del gobierno.

Acompañado de representantes de la asamblea #Yosoy132 Chilpancingo, del Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco) y del Colectivo Rebelión de la Universidad Autónoma de Guerrero, Castro Domínguez consideró que los ataques en Michoacán son una muestra de la política de represión, que continuará en el siguiente periodo gobierno de la República, para desarticular los movimientos sociales y desaparecer a las normales rurales.

Del colectivo Rebelión, José Alba Mendoza señaló que no son casuales los ataque a sectores sociales, magisteriales y estudiantiles en los estados de occidente y sur del país; recordó la represión de maestros de la sección 22 de la Coordinadora de la Educación en Oaxaca, el desalojo violento de alumnos de Ayotzinapa el 12 de diciembre del año pasado, y ahora en Michoacán, además de otros eventos similares en Morelos y Durango.

Aseguró que estas acciones, que tienen características de terrorismo de Estado, pretenden desarticular los movimientos, y evitar la oposición en el proceso de privatización de la educación pública que ya se encamina en las políticas federales.

Por su parte, Castro Domínguez explicó que la comisión que se envió a Michoacán está participando activamente en protestas, manifestaciones y bloqueos, para exigir la liberación de 49 estudiantes que siguen detenidos, a pesar de que ya se les deslindado de responsabilidad.

Añadió que no sólo los integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos y Socialistas de México (FCSM) participan en el movimiento de resistencia, también está la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, y distintas organizaciones estudiantiles, “pues es clara la represión que se nos viene en estos años, con el nuevo presidente Enrique Peña Nieto”.

Por otro lado, el dirigente denunció que el gobierno de Fausto Vallejo condicionó la libertad de los normalistas michoacanos, detenidos la madrugada del lunes, al cierre de la normal de Tiripetío; mientras criminaliza a los estudiantes ante los medios de comunicación, “haciéndolos ver como bandidos”.

Sobre el argumento del gobierno de Michoacán, que justificó el ataque a los estudiantes por el rescate de autobuses del servicio público secuestrados en las escuelas –una práctica que también se acostumbra en Ayotzinapa–, Castro Domínguez reconoció que retener unidades de transporte público es parte de sus métodos de lucha, pero se usan sólo cuando el gobierno tiene  “oídos sordos” a sus demandas.

De la asamblea #Yosoy132, Coni Pérez Silva subrayó que el gobierno tiene la obligación de atender las demandas de grupos organizados o no.

De Tadeco, Isabel Rosales expresó su preocupación por la situación de criminalización de los estudiantes y comuneros de Cherán, la violación la autonomía del pueblo originario.

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