Presentará el rector una reforma electoral para la UAG que privilegie la unidad y transparencia

Aurora Harrison

El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Alberto Salgado Rodríguez, informó que va a presentar al Consejo Universitario una reforma electoral para que se privilegie la unidad y la transparencia entre los grupos políticos.
Durante su participación ante la Comunidad Politécnica, el rector dijo que para prevenir el problema de los rechazados hay una mayor oferta educativa y en el caso del área de la salud está el proyecto de crear una unidad académica de medicina comunitaria.
“Estamos pensando crecer el área de medicina, una facultad de medicina comunitaria en la Universidad, para que los egresados vayan a las comunidades de La Montaña y Costa Chica”, dijo el rector en su participación ante los miembros de la asociación civil.
Agregó que se prevé que el próximo año se inaugure la unidad académica de medicina comunitaria, pero aun están determinando el área de factibilidad, para saber si se construye en Tlapa o en Ometepec; pero también dijo que con el Campus de Llano Largo habrá otras opciones, para que los estudiantes continúen con su formación.
Sobre el proyecto del nuevo reglamento electoral, dijo que “la UAG en el pasado ha sido afectada por divisiones internas y muchas veces es porque los procesos políticos crean divisiones entre los universitarios, que tienen impacto en el desarrollo académico, porque hay resentimientos y en los nuevos tiempos debe ser procesos civilizados”.
Explicó que hay propuesta de reglamento electoral, que a la brevedad van a presentar al Consejo Universitario, para que se normen los nuevos procesos, y para eso tomarán en cuenta la resolución del Cuarto Congreso Universitario, para que las elecciones sean equitativas y transparentes.
“Esperemos cristalizar este nuevo reglamento muy pronto, y tenemos que ver si nos alcanza el tiempo para que el próximo proceso electoral se norme bajo estas nuevas condiciones y de no ser así será con el reglamento vigente”, declaró el rector.
Una reportera preguntó sobre la corrupción, y contestó que se llevan a cabo acciones para que se reduzca y si hay casos en las escuelas que se denuncien, para que sea la Comisión de Honor y Justicia la que investigue y si hay pruebas se castigue conforme a la ley.
En el encuentro con profesionistas, Salgado Rodríguez habló de la situación de la UAG y dijo que actualmente tienen una matrícula de 73 mil alumnos, es la cuarta universidad más grande y el 96 por ciento de los estudiantes tienen materias que están en programas de calidad.
Además dijo que pretende que la UAG esté en el consorcio de las universidades mexicanas, y de la matrícula de profesores 431 tienen perfil del Programa de Mejoramiento Profesional (Promep), y hay 62 que son miembros del Sistema Nacional de Investigadores.
Detalló que hay nuevas facultades, de las que mencionó el Campus de Tecpan que funciona con tres nuevas carreras, el Campus de Taxco que trabaja con las licenciaturas de Diseño y Arquitectura, que el “crecimiento es responsable y no nada más por crecer”.
Aunque insistió que debe haber un aumento en el presupuesto de la UAG, porque el costo por un alumno en la universidad es de 16 mil 500, y en otras universidades públicas del país es de 62 mil pesos, y que pedirá recursos para las preparatorias populares.
Salgado Rodríguez detalló que el presupuesto de la universidad en este año fue de mil 900 millones de pesos, que está pidiendo que para el próximo año sea de 3 mil 500 millones de pesos; porque tienen un déficit de 366 millones de pesos al año.
Durante las participaciones de los miembros de la Comunidad Politécnica de Acapulco, Carlos Gallegos admitió que se ha satanizado a la UAG como una institución que carece de buena calidad por las malas administraciones históricas de la institución; y Andrés Flores preguntó cómo van a vincular a la universidad con organismos públicos desentralizados.
En respuesta, el rector dijo que sobre la situación de los rechazados está circunscrito por la capacidad de las facultades para recibir una cierta cantidad, además de que se requiere que se contraten más maestros para poder resolver el problema de los rechazados.