No hay denuncias en la PGJE de los agravios a la familia de Rosalinda Vargas, dice la procuradora

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

En la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) solamente tienen el antecedente del secuestro de Elizabeth Olguín Vargas, hija de Rosalinda Vargas Barrera, y no hay denuncias de los otros agravios que ha venido denunciando la profesora, aseguró ayer la procuradora Martha Elva Garzón Bernal.
Dijo que la reunión de ayer entre Ángel Aguirre Rivero y Rosalinda Vargas Barrera “fue muy provechosa” y que el gobernador le manifestó que tendrá todo el apoyo de su parte.
Entrevistada al final de la reunión, informó que la petición principal de Vargas Barrera fue que se cumplan las medidas cautelares que pidió la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), pero que ella misma ha pedido que la protección se la den policías federales, “y ustedes saben que son autoridades federales, pero el gobernador va a ser intermediario para que se cumpla con el punto número uno de la resolución emitida por la Corte Interamericana”, agregó.
Indicó que el gobierno del estado también se comprometió a gestionarle una audiencia con autoridades de Gobernación y Seguridad Pública federal, para que ella pueda tratar directamente también este punto.
En cuanto a la cadena de acciones, hostigamiento y persecución que ha denunciado la profesora Vargas Barrera, por parte de un “grupo de poder” que todavía se encuentra dentro del gobierno, la procuradora aseguró que en la Procuraduría no tienen denuncia, más que del secuestro de Elizabeth Olguín Varga.
“Cuando ella vaya a la Procuraduría y me haga una denuncia formal, yo tendré la obligación de investigar. Ella lo refirió y yo me puse a sus órdenes y como a cualquier ciudadano estoy en la obligación de atenderle”, dijo.
Sin embargo, dijo que en la reunión, Vargas Barrera no le dio ninguna referencia concreta de personal de la Procuraduría que la esté hostigando.
“Ella tiene una averiguación por secuestro y allí mismo hay otro delito, pero no se ha podido formalizar porque requerimos que ella acuda y declare. Por parte de la Procuraduría en este momento ya le dijimos que estamos a sus órdenes y le vamos a dar todas las facilidades”, declaró Garzón Bernal.
Pero agregó que la profesora pidió que “por favor, ahorita, no le mandemos llamar porque la prioridad de ella es su seguridad, entonces ella va a ir a México para hablar con las autoridades federales y cumplan con esa responsabilidad que tienen”, dijo.
En cuanto a la inconformidad de habitantes de Olinalá, principalmente taxistas, por la inseguridad, luego del levantón y posterior ejecución de un taxista el sábado pasado, la procuradora declaró que “no es así como se está manejando”.
Dijo que todo ocurrió porque desapareció un taxista que posteriormente fue encontrado muerto y, supuestamente, durante el sepelio los taxistas descubrieron a uno de los presuntos responsables al que entregaron a la Policía Municipal.
Agregó que esa fue la información que dieron los taxistas, quienes incluso dijeron que después de que entregaron al presunto responsable lo liberaron por lo que desarmaron a la policía municipal.
Aseguró que todo se debió al calor “de alguna impotencia de un crimen de un ser querido”, pero que ya intervino la autoridad municipal y que todo volvió a la normalidad.
Por otra parte, y también escuetamente, la funcionaria informó que la dependencia investiga el caso de los 17 levantados en el municipio de Ajuchitlán el sábado pasado, pero no dio a conocer mayores datos, “nosotros estamos investigando, en este momento con toda la certeza no les podría decir el número exacto (de cuantos fueron levantados y cuantos ya regresaron) porque apenas se están llevando a cabo las investigaciones correspondientes”, concluyó.a