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En pésimas condiciones, los accesos de playa en pleno puente vacacional

Yee Trujillo

Sin alumbrado público, impregnados de malos olores, obstruidos por montones de basura, escombro, mobiliario, puestos semifijos y hasta con postes tirados y alcantarillas sin tapaderas, se encuentran los accesos de playa en pleno puente vacacional.
En un recorrido realizado en algunos de los accesos de playa se observó que la mayoría se encuentra en el abandono por parte de las autoridades y por consecuencia, en pésimas condiciones.
“No, está mal, bueno, hay lugares limpios como la zona hotelera pero no todos, como restaurantes y como residentes de aquí yo pienso que le deberían de exigir al gobernador que no esté aplastado en su silla y que se ponga a recorrer el puerto porque desde en la entrada, ya tiene como ocho años que venimos y sigue igual, y luego el bacheo… estoy como en mi pueblo, en el DF, pero por ser un puerto turístico a nivel nacional como que no debe ser esta la presentación”, criticó la turista Elia Torres Miranda acompañada de su familia, mientras observaban un montón de basura que obstaculizaba casi la mitad de las escaleras del acceso de la playa La Condesa, a un costado del restaurante Mangos, y después siguieron su camino por La Costera en busca de otro acceso limpio para llegar a la playa.
En las escaleras de acceso a las playas Manzanillo y Tlacopanocha, en la zona tradicional, montones de basura y restos de pescados obstaculizaban el paso de los turistas, provocando una mala imagen del puerto a cientos de visitantes que disfrutaban del puente vacacional.
En el acceso ubicado en el condominio Torre de Acapulco, se observó una pareja de adultos mayores que con esfuerzo trataba de bajar las escaleras hacia la playa, cuidando no caer porque los costados de la escalinata se encontraban llenos de mobiliario de playa y puestos semifijos que les impedían sostenerse de las paredes como hicieron en los primeros escalones. En el lugar no se observó ninguna lámpara de alumbrado público.
A unos 150 metros, en el acceso ubicado a un costado del restaurante La Mansión, prestadores de servicios turísticos aseguraron que solamente dos lámparas iluminan la entrada, aunque en el lugar se observó una enorme lona que destaca que la playa Icacos ya fue certificada.
En otro acceso a la playa Icacos, en la plaza Canadá, uno de los encargados de la renta de sombrillas, Luis Diego Mendoza, denunció que el canal pluvial que desemboca en este acceso se encuentra azolvado y cuando llueve los prestadores de servicios turísticos han observado que material fecal escurre hacia la playa y causa malos olores, y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del municipio (CAPAMA) ha hecho caso omiso a sus reportes para atender este problema.
“No hay alumbrado en la noches, hay una bola de rateros desde las 8 de la noche a la 7 de la mañana, ya va para dos meses en lo que es el acceso a la playa”, agregó.
Además, en el lugar se observaron dos alcantarillas sin rejillas al final de la calle Nao Victoria, un registro abierto con cables de electricidad expuestos en la plaza, y todos los postes de alumbrado se encontraban despintados y oxidados.
En el acceso de la plaza España, ubicada en la calle Almirante Cristóbal Colón frente a la glorieta de Costa Azul, el lavacoches Miguel Mejía se quejó porque lo primero que observan los turistas al llegar son varios montones de tierra y desechos que dejaron los trabajadores de la CAPAMA hace una semana, cuando acudieron a desazolvar las alcantarillas.
También denunció que desde hace unos tres meses solamente funcionan dos lámparas en los 160 metros de calle, y en el lugar han ocurrido varios asaltos y afectaciones a vehículos; “quiebran los parabrisas porque está oscuro pues”, explicó. En el lugar también se observó un montón de basura en el camellón, a unos metros de la entrada del Cici.
Cerca del Grand Hotel, en el acceso de playa de la calle Fragata Zaragoza, se observó a dos turistas y su hija caminando con desconfianza alrededor de un poste del alumbrado público, que de acuerdo con los prestadores de servicios turísticos cayó sobre una barda hace más de dos meses porque la base se oxidó por completo.
A unos metros, el acceso por la calle Cañonero Bravo se encontraba obstaculizado por mobiliario de playa, camastros, sillas y mesas de plástico, mientras que otros montones de lodo y desechos se observaron cerca de una alcantarilla abierta.
En el acceso de la plaza Costa Rica, cerca del hotel Copacabana, los malos olores se percibían desde la entrada en la Laurel, y en el lugar se observaron lámparas del alumbrado público rotas y varios montones de basura.

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