Vuelven los partidos al debate sobre la reforma laboral y concluyen sin avances

Érika Hernández / Agencia Reforma

Ciudad de México

En el reinicio de la discusión de la reforma laboral, los diputados no acordaron siquiera el mecanismo para analizar la minuta de la nueva Ley Federal del Trabajo, pero retomaron los reclamos sobre democracia y transparencia sindical.
Tras poco más de una hora de catarsis, el presidente de la Comisión de Trabajo, el priista Carlos Aceves del Olmo, terminó abruptamente la reunión para continuar hoy martes.
El diputado Juan Bueno, del PAN, planteó aprobar en lo inmediato los cuatro artículos en los que hay consenso, pues fueron aprobados por unanimidad en el Senado, y luego diseñar la discusión de los fragmentos controvertidos.
Tal es el caso de los artículos 371, 373, 388 Bis y 390, que tratan sobre democracia y transparencia sindical y contratos colectivos.
“Esta reforma pone en orden a lo que hoy está en desorden y pone límites a lo que hoy sucede en contra de los trabajadores. De ninguna manera favorece el despido ni trastoca el derecho de los trabajadores. Estamos listos a entrarle al tema”, dijo el panista, cuya propuesta no fue tomada en cuenta.
De hecho, antes de la sesión la bancada del PAN indicó que están dispuestos a cambiar la redacción de los artículos controvertidos para avanzar en la discusión.
“Nosotros estamos analizando y explorando todas las posibilidades. Estamos no sólo en la posición de mantener la minuta en sus términos, sino de analizar básicamente redacciones alternas del 388 Bis y 390”, dijo Ricardo Anaya en conferencia de prensa.
En la comisión, el priista Fernando Salgado aseguró que su bancada se mantiene en que no se debe violentar el derecho de los trabajadores, y demandó tener cuidado en que la democracia que se exige a los sindicatos no se transforme en demagogia y la bandera de transparencia no se vuelva cinismo.
“Por un lado se quiere garantizar el voto secreto, pero por otro lado se quiere exhibir a los trabajadores que están buscando la contratación colectiva y los deja en un estado absoluto de indefensión”, apuntó.
El perredista Martí Batres afirmó que su partido votará en general contra la reforma y en particular a favor de los cambios hechos en el Senado.
“Estamos en contra de lo que tiene que ver con la flexibilidad laboral y a favor de todo aquello que sea democratizador. Nos gustaría que pudiéramos trabajar en una lógica de consenso, abriendo una discusión nueva”, dijo.
Mientras que la diputada del Movimiento Ciudadano, Luisa María Alcalde, quien vistió una playera a favor del artículo 388 Bis, aseguró que éste es clave en la discusión si se quiere fortalecer el sindicalismo.
Luego de una primera ronda, Aceves dio la palabra al perredista Silvano Blanco, quien acusó al PRI de cambiar su postura y ahora pretender sacar la reforma antes del 1 de diciembre, cuando toma posesión “su jefe”.
Aceves reconoció que hubo un cambio de postura porque el Presidente electo, Enrique Peña Nieto, consideró que si la iniciativa preferente es del Presidente Felipe Calderón, él la debe publicar.
“Dice: ‘tienen prisa’, la política no es el no por el no, la política también es generosidad, y lo acaba de demostrar Ebrard al invitar a Calderón a la inauguración de la línea 12 (del Metro).
“Entonces esto tuvo un cambio cuando Peña Nieto dijo: ‘si es preferente que sea preferente, es del pesidente Felipe Calderón, y si la va a publicar él que la publique, ustedes analicen lo que le conviene o no a los trabajadores”, señaló.
Afirmó que no han buscado a los panistas para decirles que por generosidad la aprobarán antes del 1 de diciembre.
“No, estamos dejando que esto tome su cauce. Sé que hay mucho interés por debatir esto y lo haremos, porque mañana estamos citados a una nueva sesión y aquí termina ésta”, dijo.