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Amagan ejidatarios de Chichihualco con cortar el agua a la cabecera si no los dejan explotar el bosque

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Ejidatarios de Chichihualco pidieron ayer la intervención del gobernador Ángel Aguirre Rivero para evitar un enfrentamiento con opositores a la explotación del bosque que hacen con un permiso emitido por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), pero que tiene suspendidos los trabajos desde el 23 de octubre.
Advirtieron que en la zona del conflicto permanece un ambiente de tensión por la presencia de policías municipales encapuchados y armados que respaldan a los ecologistas, de los cuales algunos también van armados e impiden que los ejidatarios continúen con el corte de árboles.
Los integrantes del Comisariado Ejidal responsabilizaron de los posibles hechos de violencia al presidente municipal, Leopoldo Cabrera Chávez, pues denunciaron que ha asumido una posición parcial en el conflicto.
En una conferencia de prensa encabezada por el presidente del Comisariado Ejidal  Faustino Visoso Duque, el secretario Alfonso Duque Marino y el presidente de la Comisión de Vigilancia Cándido Ramírez Salvador denunciaron que ayer tenían agendada una reunión con el secretario de gobierno, Humberto Salgado Gómez, representantes de la Semarnat y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) con los ecologistas que se oponen al aprovechamiento forestal, pero que de última hora se aplazó aunque no les avisaron para cuando.
Los ejidatarios aseguraron que están actuando conforme a la ley, que lo que están haciendo no se trata de una tala clandestina del bosque, sino de un programa de manejo forestal autorizado por la Semarnat que cumple con la normatividad y la Ley. Además aclararon que la ley establece que los bosques y el agua es propiedad de los ejidatarios no del pueblo en general, por lo que amenazaron que si los ambientalistas y el alcalde insisten en impedirles el aprovechamiento forestal ellos responderán  cortando el agua a la cabecera municipal, “porque los manantiales pertenecen al ejido”, advirtió el presidente del Consejo de Vigilancia, Cándido Ramírez Salvador.
Luego de 5 meses de que detonó el conflicto por la explotación de la madera en ese municipio de la parte baja de la Sierra, los representantes ejidales acompañados por unos 20 ejidatarios ofrecieron ayer una conferencia de prensa en esta capital, en la que insistieron en que no actúan fuera de la ley y acusaron que los ecologistas se oponen al aprovechamiento de la madera en venganza de que en enero de este año perdieron la elección del comisariado ejidal.
El presidente del comisariado ejidal, Faustino Visoso Duque, incluso deslegitimó la lucha de los ecologistas, pues dijo que ellos protegen los intereses de empresarios de la cabecera municipal que tienen purificadoras de agua, entre ellos el propio presidente municipal, Leopoldo Cabrera Chávez y Jorge Adame Marino, otro de los integrantes del grupo de ambientalistas.
El conflicto comenzó en mayo, al mismo tiempo que los ejidatarios iniciaron la explotación del bosque, soportados por un permiso que les autorizó la Semarnat con una vigencia de 10 años. Sin embargo, en el convenio que firmaron con la empresa Compañía Forestal Lagunillas, sólo comprometieron la venta de mil 900 metros cúbicos para extraerse aproximadamente en un año.
Los ecologistas se movilizaron los primeros días de junio y suspendieron el corte de la madera en el punto conocido como Agua de las Tablas, en donde inmovilizaron seis camiones de plataforma cargados con trozos de madera, dos grúas que eran utilizadas para cargar los camiones y un trascabo para abrir las brechas y sacar la madera cortada.
Los ejidatarios y la empresa Compañía Forestal Lagunillas suspendieron sus actividades hasta el 19 de octubre pasado, cuando obtuvieron por parte de la Semarnat un cambio de área para aprovechar el mismo permiso y comenzaron a cortar la madera en los puntos conocidos como El Faisán y Ojo de Agua, “porque (los ecologistas) venían argumentando que en Agua de las Tablas se encontraban los manantiales que surten de agua a la cabecera municipal”.
Pero los ejidatarios volvieron a ser parados el 23 de octubre y ayer denunciaron que esta vez los ecologistas acudieron acompañados por policías municipales armados y encapuchados que mandó el presidente municipal Cabrera Chávez y dijeron que algunos de los llamados ambientalistas también iban armados.
El comisariado Visoso Duque demandó que el presidente municipal saque las manos del conflicto, pues dijo que la Ley Agraria “dice bien claro que los bosques son propiedad del ejido y que estos son los únicos que pueden aprovechar la madera con la autorización de la Semarnat y cumpliendo con la normatividad, como lo estamos haciendo nosotros, pero el presidente mandó a la Policía Municipal para suspender los trabajos, nosotros lo respetamos porque es la autoridad del pueblo, pero también le pedimos que respete nuestro ejido, en donde sólo los ejidatarios mandan”, dijo.
El dirigente de los ejidatarios deslegitimó el movimiento de los que se oponen al aprovechamiento forestal pues dijo que no son realmente ecologistas “son unos sinvergüenzas” y los acusó de que cada vez de que suben a la zona forestal  “cargan con todo, se traen la madera que queda, las pertenencias de los trabajadores de la empresa y las nuestras y hasta la ropa y los utensilios de la señora que prepara la comida”.
Dijo también que su lucha no es legítima porque surgió en venganza a que el 15 de enero pasado perdieron la elección de comisariado. Recordó que en la elección hubo dos planillas: la que encabezó Claudio Duque Marino, quien ahora es de la dirigencia de los ecologistas, y la que ganó, que es la que encabezaba Faustino Visoso Duque.
El comisariado aseguró que el grupo que perdió la elección no sólo pretendía aprovechar los recursos forestales, sino mantener el aprovechamiento del agua que baja de los manantiales pues con ellos se encuentran los empresarios que tienen purificadoras de agua en el municipio y citaron al propio presidente municipal, Leopoldo Cabrera Chávez y a Jorge Adame Marino.
“No es verdad que sean ecologistas, nunca los hemos visto cuidando los bosques, previniendo los incendios forestales o reforestando la zona, solamente se aparecen en las elecciones”, señaló Alfonso Duque Marino, secretario del comisariado ejidal y hermano de quien perdió la elección en enero pasado y ahora es dirigente del grupo de ecologistas, Claudio Duque Marino.
Los representantes ejidales demandaron la intervención del secretario de gobierno Humberto Salgado para evitar un enfrentamiento entre los dos grupos, y una audiencia con el gobernador Ángel Aguirre, pues reclamaron que éste solamente recibió a sus opositores y a ellos no ha querido atenderlos para conocer su versión.
“Nosotros solamente queremos que se dé cumplimiento a la Ley Agraria, que el presidente municipal deje de tomar partido en este conflicto, porque él debe permanecer imparcial y debe dejar atrás los agravios políticos”, dijo el comisarado ejidal.

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