Demora el Ayuntamiento de Iguala la incapacidad médica para la trabajadora que abortó, denuncian

María Esther Tavera Martínez, trabajadora del ayuntamiento de Iguala que abortó supuestamente por haber sido forzada a realizar trabajos de limpieza, denunció que la administración que encabeza el alcalde José Luis Abarca Velázquez se negó a entregarle una incapacidad médica misma que le dieron hasta el medio día de ayer.
Ayer la mujer de 23 años esperó en la entrada del departamento Jurídico junto a una veintena de trabajadores que fueron despedidos para que se definiera su situación laboral.
En entrevista colectiva, la trabajadora mencionó que desde la semana pasada que abortó no ha tenido ningún tipo de contacto con las autoridades municipales. “Ahora me encuentro con la sorpresa de que ya me mandaron al Jurídico y la incapacidad hasta ahorita no me la han querido dar”, acotó.
Tavera Martínez precisó que “me dicen que no aparece -la autorización de su incapacidad- que se perdió la hoja del expediente de ese día que me atendieron y que la incapacidad aquí no la tienen”.
A pregunta, la trabajadora calificó como insensible la postura de la administración municipal. “Fuimos y seguimos sufriendo de hostigamiento, tenemos aquí todo el día y no se vale, así me traen desde ayer”, mencionó.
Asimismo, Mayra Tovar reviró un conjunto de declaraciones que hicieron en conferencia de prensa la coordinadora de la Unidad Médica de la administración municipal, Guadalupe Aponte, la coordinadora de los Centros Comunitarios, Paloma Rabadán, y el alcalde.
En esa conferencia de prensa, a la que fueron convocados sólo algunos medios locales, la administración culpó a la trabajadora del aborto e incluso se comentó que Mayra Tavera padecía de un embarazo fuera de la matriz.
“Según la doctora Guadalupe Aponte, ella declara que a mí me hizo un estudio ginecológico, ayer yo hablé con ella y dijo que ella no lo dijo y lo que había dicho fue por órdenes superiores porque así se arreglaron con ella”, explicó.
Recordó que “todo empezó el viernes (26 de octubre) me pusieron a hacer todos los trabajos pesados, me puso a hacerlos el encargado del centro comunitario – el ex regidor, Arturo López Facundo-”.
“Yo le comenté que estaba embarazada y que no podía hacer esfuerzos pero no puso atención a eso, terminé las cosas y comencé con dolor de la cadera y el vientre”, narró.
“El sábado seguí igual y fui al doctor, fui a la Clínica Tovar -propiedad del ex alcalde priista, Raúl Tovar Tavera- a que me hicieran un estudio y me dijeron que estaba bien y me dio una receta con reposo absoluto”, sostuvo.
“Entonces el lunes (29 de octubre) vine a pedir mi incapacidad y me dijo (la responsable de la Unidad Médica, Guadalupe Aponte) que no, que no era necesario, de hecho ella dice que yo le presenté una receta del día viernes”, acotó.
Agregó que “no me quiso dar el reposo sólo me dio reposo relativo y me dio una receta en la que sólo transcribió lo que yo traía en otra receta -la que le dieron en la clínica del ex alcalde-”.
Además, la trabajadora ironizó que Guadalupe Aponte transcribió la receta que le dieron en la clínica Tovar, “con unos simples errores, me recetó unos supositorios por vía vaginal”.
Se le recordó que la coordinadora de la Unidad Médica del ayuntamiento dijo que su embarazo era anembriónico y que en conferencia de prensa los funcionarios habían dicho que de todas maneras perdería el bebe. Al respecto mencionó que “ellos dicen que el embarazo estaba fuera de la matriz, pero yo aquí tengo el ultrasonido, están todos dentro del útero”. Y mostró a los reporteros unas gráficas de ultrasonidos recientes en los que aseguraba que el feto estaba dentro de su útero.
Alrededor de las 11 de la mañana se presentó al departamento Jurídico la coordinadora de Centros Comunitarios, Paloma Rabadán quien visiblemente molesta encaró a Mayra Tavera y le dijo que cuando estuviera ante los medios dijera la verdad. Cerca de las 12 del día le fue entregada el oficio de incapacidad a la trabajadora. (Fernando Hernández I guala).