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Walton politiza asuntos financieros con datos que no son fidedignos: Apreza

De la corresponsalía

Chilpancingo

El coordinador de la bancada del PRI en el Congreso local, Héctor Apreza Patrón, afirmó que las acusaciones del presidente municipal de Acapulco, Luis Walton Aburto, en contra del ahora diputado federal Manuel Añorve Baños tienen motivaciones políticas, porque no tuvo la capacidad de presentar un informe financiero “con datos fidedignos”.
Por su parte la legisladora local y esposa de Añorve Baños, Julieta Fernández Márquez, dijo que las acusaciones son sólo “pretextos” del alcalde para “no trabajar”.
En entrevista en el Congreso local, Apreza Patrón cuestionó los señalamientos del presidente municipal, y lo acusó de politizar cuestiones financieras, pues dijo que es de todos sabido que en los ayuntamientos existen deudas institucionales, como es el caso de Acapulco.
Echó mano de lo que el secretario de Planeación y Desarrollo Económico del ayuntamiento, Carlos Álvarez, dijo durante la conferencia de prensa, que “no cuentan con información fidedigna que se haya procesado desde un sistema de contabilidad gubernamental”.
Afirmó que no se puede tomar como seria una acusación cuando los propios denunciantes reconocen no tener datos precisos y confiables.
Consideró que la denuncia de Luis Walton no debió hacerse pública, sino directamente ante los órganos fiscalizadores, pues el procedimiento utilizado por el alcalde sólo tiene la finalidad de politizar temas financieros, comentó el diputado local.
A nombre de la fracción del PRI en el Congreso, Héctor Apreza dijo que se deben fiscalizar los recursos públicos entregados al ayuntamiento de Acapulco a la administración pasada y las que la antecedieron, y sancionar a todos los que cometieron irregularidades.
De esa manera urgió a Luis Walton para que presente las denuncias correspondientes ante la Contraloría General del Estado (CGE), la Auditoría General del Estado (AGE) y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y deje de politizar la problemática financiera.
En otro momento la diputada priista Julieta Fernández dijo que cuando su esposo asumió el cargo de alcalde del puerto, no anduvo acusando a sus antecesores de adeudos y desfalcos, porque consideró que ese es sólo un pretexto para no trabajar.
Reconoció que en Acapulco hace falta calidad en muchos de sus servicios, y que a quienes les toca estar al frente de la administración municipal “deben estar preocupados en recoger la basura y brindar seguridad que tanta falta hace”.
Mientras distribuía a los reporteros el comunicado que un día antes difundiera el diputado federal Manuel Añorve, en el que de inmediato respondió a las acusaciones de Walton Aburto, exhortó al edil porteño a que realice un informe con cifras oficiales y proceda a presentar las denuncias correspondientes ante los órganos fiscalizadores.
“Ellos ya lo dijeron, que no hay ningún sustento en libros ni en contabilidad, entonces es una cuestión política”, dijo, y lamentó la falta de seriedad del alcalde al realizar acusaciones sin fundamentos.
Dijo que las finanzas del ayuntamiento “están auditadas cien veces, pero eso no evitará que la nueva administración seguirá echando vuelos y campanas”.
La diputada local fue rescatada de las preguntas de los reporteros por su compañera de fracción, Verónica Muñoz Parra, quien la separó del grupo llevándosela de un brazo.

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