Silvia Romero, en desacuerdo con la denuncia penal del subsecretario contra tres empleados

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, consideró que llevar a los órganos judiciales los asuntos laborales no soluciona los conflictos, aclaró que su política es de diálogo y la próxima semana retomarán las mesas de trabajo con las organizaciones sindicales.
Romero Suárez habló sobre la demanda ante la Procuraduría General de Justicia del Estado contra tres trabajadores de oficinas centrales de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), por daños, falsificación de documentos y uso indebido de logos y marcas institucionales, señalados por el subsecretario de Planeación Educativa, Francisco Abarca Escamilla.
En entrevista telefónica, Romero Suárez, aclaró que son distintos los conflictos de oficinas en Chilpancingo, con los de la delegación regional de Servicios Educativos Acapulco-Coyuca de Benítez, que también tienen tomadas las oficinas y que han coincidido en el rechazo al nuevo Modelo Normativo de trabajadores que regula la herencia de plazas, movimientos y asignación de los trabajadores de nuevo ingreso.
Indicó que en la capital se presentaron problemas en la subsecretaría de Planeación Educativa que fueron creciendo y desde hace dos semanas los inconformes exigen la salida del titular.
Sin embargo, la funcionaria aclaró que no pueden estar confrontándose autoridades y trabajadores pero existe disposición de dialogar con los grupos.
Destacó que en el movimiento participan representantes de delegaciones de la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) por lo que la intervención de las dos representaciones permitirá revisar a fondo la problemática de la Subsecretaría.
Aceptó que genera inconformidad entre los trabajadores que desde la SEG se hayan presentado demandas penales contra tres de sus compañeros y declaró que quien haya dejado de cumplir el trabajo para el que fue contratado tendría que ofrecer una explicación.
Consideró que con la judicialización, los asuntos labores toman otro curso y ella le ha apostado al diálogo. Además, informó que van a restablecer las mesas de trabajo con la CETEG que se habían cancelado hace dos semanas. Agregó que se acababa de comunicar con el secretario magisterial, Gonzalo Juárez Ocampo, para acordar la siguiente reunión de trabajo.
En el segundo caso, donde se tomaron la delegación de los servicios educativos de la región Acapulco-Coyuca de Benítez, señaló que es un asunto de carácter político-sindical que comenzó por la reasignación de un trabajador cuando concluyó una comisión en la sección 14 del SNTE.
Indicó que así comenzó el problema y sumaron el tema del Modelo Normativo que ya fue consensado con los representantes de la sección 14 y la CETEG.
Reiteró la importancia del modelo normativo para ayudar a reordenar las estructuras ocupacionales en la SEG, es decir, docentes, directivos, comisionados; “para nadie es desconocido el desorden de carácter administrativo, el exceso de personal en algunas escuelas y la falta de maestros en otras”, recordó.
Aseguró que el Modelo Normativo no violenta los derechos de los trabajadores pero quizá faltó más difusión en las regiones para evitar estos conflictos.
Aceptó que también tiene disposición para reorientar el Modelo Normativo de trabajadores si no está funcionando bien, particularmente en las escuelas secundarias, porque no es lo mismo que un maestro de primaria herede su plaza a su hijo con perfil que en una secundaria.
Explicó, por ejemplo, que cuando un maestro de inglés de secundaria se jubila y propone a su hijo o a una tercera persona para heredar su plaza, no siempre tienen el mismo perfil y en la escuela los maestros que hay disponibles para ocupar esas horas no necesariamente tienen una formación en esta materia.
Añadió que en las primarias es menos complicado y aceptó que habrá de establecer las mesas de trabajo para resolver los conflictos particulares, y solicitó respeto para la delegada de la región Acapulco-Coyuca, María Edith Zurita Petatán, que ha sido ofendida y desalojada de sus oficinas de manera arbitraria.
Sobre las declaraciones del gobernador, Ángel Aguirre Rivero, de que los maestros inconformes en Acapulco protestan porque quieren seguir vendiendo sus plazas y sedes de trabajo, Romero Suárez señaló que la herencia de plazas es un tema que no se va desterrar en mucho tiempo porque se ha convertido en usos y costumbres.
Sin embargo, insistió en que con el Modelo Normativo de trabajadores se regula la herencia para evitar el fraccionamiento de las claves docentes en varias zonas administrativas.
Asimismo, aseguró que las propuestas de los jubilados se tendrán que ir a donde hagan falta sus servicios, “eso termina con privilegios y cancela la posibilidad de que el jubilado de una escuela preferente herede su lugar”.
Finalmente, sobre los problemas de inseguridad en Acapulco, la funcionaria señaló que el martes regresan a clases dos primarias y los trabajadores de Cecyteg plantel Mozimba en paro y revisaban el caso de la escuela secundaria Técnica 153, para que vuelvan a sus actividades.
Afirmó que los policías que hacen sus rondines alrededor de los centros escolares están entregando constantemente informes a los maestros y evidencia de los avances.