A pesar de que siguen la violencia y extorsiones, para las autoridades es efectivo el Guerrero Seguro

Daniel Velázquez

Las declaraciones en torno a la efectividad de la operación Guerrero Seguro, aun cuando continúan los hechos de violencia en el puerto como ejecuciones, secuestros, extorsiones, cobro de piso y robo de vehículos, son parte el discurso que han manejado autoridades federales y estatales como el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré Romero, el gobernador Ángel Aguirre Rivero y el jefe de la División de Operaciones de la Policía Federal, Eduardo Fragoso Díaz.
En el informe de los 400 días de la operación Guerrero Seguro, correspondiente al periodo del 8 de octubre de 2011 al 11 de noviembre de 2012, la Secretaría de Seguridad Pública Federal presentó un reporte en el que expuso que la operación Guerrero Seguro ha “desarticulado en forma efectiva a las organizaciones criminales que operan en Acapulco”.
A fines de octubre, el diario Reforma publicó en primera plana sobre la ejecución de dos funcionarios de la Dirección de Catastro municipal, Simon Sokhn Casis y Luz María Ortega Baltazar, presuntamente porque se negaron a proporcionar información al crimen organizado sobre los propietarios de inmuebles ubicados en las zonas de mayor plusvalía en el puerto y que, a consecuencia de la inseguridad, de acuerdo con agentes inmobiliarios, el valor de los bienes inmuebles en el puerto ha decaído un 30 por ciento como consecuencia de la inseguridad.
En declaraciones recogidas por el periódico Reforma, el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, dijo que no estaban satisfechos con los resultados de la operación Guerrero Seguro pero que sí había una disminución de la violencia.
“El propio puerto de Acapulco, a pesar de que todavía no estamos plenamente satisfechos con los resultados y de los incidentes recientes que estamos revisando con el gobierno del estado, también ha visto una disminución en general de los fenómenos de violencia que preocupan”, indicó en conferencia de prensa.
“Y desde luego es indispensable redoblar esfuerzos, por un lado en la aplicación del Operativo Guerrero Seguro y por otro lado también en el avance en la depuración de las policías estatales y particularmente la municipal como tareas urgentes”, dijo.
En septiembre, en una vista al puerto donde entregó radio receptores de alerta sísmica, Poiré Romero indicó que en Guerrero los delitos de robo, robo con violencia, secuestro, extorsión y homicidio había “indicadores a la baja” pero es necesaria la certificación de policías para consolidar la estrategia de Guerrero Seguro.
En esa misma ocasión el gobernador puso a disposición los resultados de la operación para que “se comparen y se constate que hay una disminución en los hechos delictivos”.
“No hemos dicho que es para echar las campanas al vuelo, somos los primeros en no estar satisfechos con estos resultados pero de que ha habido un avance desde luego que lo ha habido y ahí están las cifras que no mienten”, indicó.
A finales de agosto después de la sesión de la Comisión Ejecutiva de Turismo de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), Aguirre Rivero afirmó que la violencia en el estado había disminuido de acuerdo con los registros estadísticos de la operación Guerrero Seguro, los cuales ofreció para quien deseara consultarlos.
“A partir del operativo Guerrero Seguro a habido una disminución importante en el número de delitos que se han venido presentando en el puerto y el estado de Guerrero, no estamos satisfechos somos los primeros en manifestarlo necesitamos fortalecer mas la presencia de nuestras policías, capacitar, certificar…” , concluyó.