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Protestan ex trabajadores de hotel en Troncones; exigen la deportación de la administradora

Brenda Escobar

Troncones, La Unión

Ex trabajadores del hotel Casa de Oro, ubicado en la comunidad ecoturística Troncones del municipio de La Unión, protestaron en la avenida principal de esa localidad para exigir al Instituto Nacional de Migración (INM) que deporte a la administradora de esa hospedería, Tina D’morse, a quien acusaron de que humilla a los empleados y tolera el acoso sexual de su esposo contra las trabajadoras.
Alrededor de las 9 de la mañana, unas 25 personas, entre hombres, mujeres y niños, todos ellos vecinos de Troncones, se apostaron en la entrada a la comunidad con pancartas en las que expresaban su rechazo a la mujer extranjera, y mostraban las pancartas a los automovilistas.
Uno de los ex trabajadores de la hospedería, Luis Solís Lujano, informó que decidieron hacer pública la inconformidad contra D’morse, “porque es una persona no grata para Troncones, desde que llegó en 1997 ha mostrado una actitud racista en contra de los mexicanos que trabajamos en ese hotel y en las otras 14 casas que administra aquí en la comunidad. Es una mujer que por cualquier motivo nos insulta, nos agrede verbalmente con palabras obscenas y encima nos explota laboralmente porque nos paga una miseria”.
Agregó que él fue despedido de manera injusta, pues la mujer lo acusó de haberse robado 100 pesos, “cuando llegó mi día de pago, recibí mi dinero y al contarlo delante de ella me hacían falta 100 pesos, se lo dije y me contestó que yo me los había robado y entonces, sin más, me despidió”.
Dijo que hay muchos vecinos de Troncones que han sido humillados por la extranjera, pero no protestaron por miedo a las amenazas de muerte que les ha hecho el marido de la administradora, Gilberto Quezada López, a quien conocen con el sobrenombre de Imer, “él anduvo diciendo que tiene contacto con gente mala y que si hacíamos algo, nos íbamos a arrepentir”.
La señora Matilde Vergara dijo que durante 11 años se desempeñó como camarista en ese hotel, “y siempre me insultaba por cualquier cosa, me explotó cuanto quiso porque los primeros cinco años me pagaba bien, los años restantes ya no me aumentó el sueldo, al contrario, me lo bajó en complicidad con la contadora que trabaja con ella que se llama Alejandra Camacho y que está en Zihuatanejo; luego, cuando me despidió, me pagó lo que quiso de liquidación porque me dijo que era mucho dinero el que me correspondía”.
La joven Marisela Castro Vergara denunció que ella fue víctima de acoso sexual por el esposo de Tina D’morse y que cuando le dio la queja, “ella no me creyó, pero es lo mismo que hace con todas las mujeres que trabajan en ese hotel, y nos amenaza con que si decimos algo, él tiene contactos con gente peligrosa y que nos atengamos a las consecuencias”.
Otro ex trabajador, Orbelí Cárdenas, comentó que el esposo de la mujer acosó sexualmente a su esposa y por eso dejaron de trabajar en el hotel, “ella es una persona muy conflictiva que se siente poderosa porque es la encargada de administrar 14 casas aquí en Troncones, y un día antes (de la protesta) anduvo visitando a los propietarios de otros hoteles para pedirles que a todos los que participamos no nos den trabajo, pero afortunadamente con ningún otro extranjero de aquí de Troncones tenemos problemas, ella es la única, todos los demás son personas que nos respetan y se dan a querer”.
Por su parte, María Solís, exigió a la delegada del INM, “que actúe, porque nosotros fuimos el sábado a Migración en Zihuatanejo y nos dijeron que ahí no teníamos nada que hacer, nosotros queremos que la saquen del país porque en la oficina de Migración nos dijeron que ni la tienen registrada, también sabemos que está por conseguir la nacionalidad mexicana, no queremos que esté aquí en Troncones, que se vaya a otro lado si no la pueden echar a su país, porque no se vale que venga aquí a humillarnos”.
Y continuó, “queremos decirle a la señora delegada de Migración que no se vale que estén trabajando como tapaderas de gente extranjera que nos hace daño, somos mexicanos y ellos están para atender nuestras quejas pues no es la primera ocasión que hemos ido a esa oficina en Zihuatanejo a quejarnos contra Tina y no hacen nada, ¿de qué se trata, señora delegada?, queremos que intervenga, porque esa mujer no es grata en Troncones”.
Luego de la manifestación en la avenida principal, los inconformes marcharon aproximadamente dos kilómetros para protestar afuera del pequeño hotel y por algunos minutos colocaron las pancartas frente al portón mientras que a gritos exigían a la extranjera que saliera a darles la cara, pero ni se asomó.

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