Marchan campesinos en Acapulco y ocupan la Protur; exigen obras que les prometió el Gobierno

Mariana Labastida

Integrantes de diferentes organizaciones de campesinos, mujeres productoras y colonos de Acapulco, Tierra Colorada y Ayutla se instalaron dentro de las oficinas de la Promotora Turística (Protur) para exigir que les resuelvan las peticiones que hicieron el año pasado y que según el acuerdo con el secretario de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, empezarían a atender desde marzo de este año.
Para llegar a las oficinas de la Protur, los inconformes marcharon por el bulevar de las Naciones del entronque con la autopista del Sol a las oficinas de la dependencia estatal. A los campesinos y colonos les advirtieron que se inicio una averiguación previa por la irrupción en las oficinas estatales, un agente del Ministerio Público les pidió que desalojaran y ante la indiferencia por atenderlos, colocaron una anafre para preparar sus alimentos.
Unos 50 campesinos y colonos de Acapulco, Ayutla y Tierra Colorada marcharon a las oficinas de la Protur gritando consignas como, “Aguirre decía que todo cambiaría, mentira, mentira la misma porquería”, “el pueblo callado jamás será escuchado”, “el pueblo se cansa de tanta pinche tranza”.
Al frente de la marcha, que formaron en cuatro filas, llevaban una manta en la que se leía “Organizaciones Campesinas de los Pueblos Indígenas de Ayutla, exigimos solución inmediata a nuestras demandas ya planteadas ante el gobierno del estado y Secretario General”.
En las pancartas que llevaban pedían al gobernador, Ángel Aguirre Rivero, solución a sus peticiones y la destitución de Humberto Salgado.
“El 12 de diciembre no se olvida, justicia” exigían en otras, ya que algunos de ellos participaron en la movilización de los jóvenes de Ayotzinapa que terminó en el desalojo violento donde asesinaron a dos estudiantes y murió el empleado de una gasolinera.
“Exigimos solución a las demandas de los pueblos y no más atole con el dedo”, “los campesino y campesinas del municipio de Ayutla exigimos más apoyo para el campo, solución inmediata” eran las peticiones que hacían por escrito los manifestantes.
Al llegar a las oficinas de la Protur los manifestantes aprovecharon que una persona de intendencia abrió la puerta de metal colocada en las escaleras de acceso para entrar, detuvieron al policía  que cuida la entrada e impidieron que la cerrara, se dio un forcejeo con el coordinador de la Organización Democrática y Plural,  César Suárez, quien permitió el paso de todo el grupo.
Los manifestantes se instalaron en la sala de espera de la  recepción de la Protur, los trabajadores de la dependencia, sorprendidos por el ingreso del grupo, preguntaron qué era lo que querían y se retiraron de la oficina, mientras las mujeres comenzaron a sacar sillas de las oficinas abiertas, las cuales acomodaron junto a los sillones para sentarse todos en el mismo lugar.
“¿No tendrá un cafecito?” dijo una de las manifestantes a las recepcionistas de la dependencia, que no dieron respuesta, pero mientras sacaban las sillas encontraron el refrigerador de la dependencia y sacaron los refrescos y aguas que se estaban dentro.
Los integrantes Organización Campesina de los Pueblos Indígenas de Ayutla, el Consejo Democrático y Plural, Consejo de Mujeres Productoras y Campesinos Marginados de Chacolapa, Tierra Colorada, se instalaron a esperar que les dieran respuesta a sus peticiones.
El coordinador  de la OCPIA, Ramiro Galindo Salomé, informó que el 7 de noviembre del 2011 se reunieron con el secretario de gobierno, Humberto Salgado a quien le entregaron una lista de peticiones entre ellas proyectos productivos, de vivienda,  apoyos para el campo, fertilizante y obras.
El funcionario quedó en resolverles en marzo de este año, y les prometió que se harían tres obras: la pavimentación de la calle principal de la colonia Altos de Miramar, Acapulco y de la comunidad de Chacalapa, Tierra Colorada, además de la construcción de tres aulas en la comunidad de Azozuca, Ayutla, las cuales no se han realizado.
“Que cumpla con su palabra que cumpla con lo prometido”, exigió Galindo Salomé, quien agregó que les dijeron que para que se hagan las obras solo falta la firma de Salgado Gómez y “se ha estado negando a firmar el documento, que cumpla con lo que ya habíamos convenido en la mesa de trabajo”.
Galindo Salomé enfatizó que no querían marchar ni plantarse en las oficinas de la Promotora Turística, sin embargo “no vemos respuesta, ninguna formalidad, nos han estado llevando, que están trabajando sobre eso, un año y no solucionan nada quiere decir que nos han estado engañando”.
En las oficinas se comentó que Humberto Salgado tenía una reunión a las 11:45 de la mañana, quince minutos después de que llegaron los campesinos y colonos, sin embargo el funcionario no llegó, que era también con él que los manifestantes pedían hablar, les dijeron que el secretario de Gobierno dijo que los podía atender el miércoles.
Ante la respuesta, los campesinos y colonos determinaron que esperarían en las oficinas que se llegara el día de la reunión.
Cuando llegó el director de la Protur, Juan Salgado, les dijo que los iba a desalojar y que se iba a iniciar una averiguación previa en el Ministerio Público, por lo que lo responsabilizaron de lo que les pudiera ocurrir.
Después de las 2 de la tarde, Juan Salgado salió a hablar con ellos y se comprometió a buscar que Salgado Gómez los recibiera;  al momento de estar en la sala con los manifestantes le molestó al funcionario que le dieran una hoja con el nombre de otra organización, por lo que exigió que cerraran la puerta de acceso para que nadie más entrara y le dijo a César Suárez del Consejo Democrático y Plural que no iba a permitir que llevaran más personas.
Previo, vía telefónica la subsecretaria de Asuntos Políticos, Rosana Mora Patiño habló con César Suárez, quien dijo que con manifestaciones y protestas no los atenderían, que no iban a permitir que llegaran de esa manera a exigir y que la solución de sus peticiones se les daría en enero.
Los campesinos y colonos decidieron esperar la reunión con Salgado Gómez el miércoles, colocaron un anafre en el pasillo de acceso a la Protur para  preparar alimentos y César Suárez dijo, “no nos interesa en si reunirnos con Humberto, si nos recibe o no, queremos que nos resuelvan, que nos digan cuándo, no estamos pidiendo nada con lo que no se haya comprometido”.
También acudieron a las oficinas agentes de la agencia de ataques a vías de comunicación dependiente del MP Central y la agente del MP Coloso, Victoria Brugar pidió a los manifestantes que hicieran sus peticiones por escrito y que regresara después una comisión e invitó a dejar el área, a lo que le  dijeron que ya habían entregado sus peticiones y solicitado por escrito cuatro veces una reunión con Salgado Gómez sin tener respuesta, por eso estaban ahí y no se irían.
A las 3 de la tarde, por órdenes de Juan Salgado, los trabajadores de la Protur sacaron los cajones de los archiveros ubicados en la recepción, se llevaron los documentos a otra área y cerraron con llave todas las oficinas para dejar a los manifestantes en la sala de la recepción, vigilados por dos policías.
“Ellos se quieren quedar, que se queden, yo voy a comer” dijo el director de la Protur al preguntarle si no  los iba a atender.
Por la noche, los manifestantes continuaban dentro de las oficinas de la dependencia estatal sin ser atendidos por Salgado Gómez y sin respuesta a sus peticiones.