Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Marcial Rodríguez Saldaña

En diversos medios de comunicación se ha publicado información relativa a la desaparición del programa Guerreros por la alfabetización lo cual resultaría grave ya que incide de manera determinante en el desarrollo del estado de Guerrero.
1.- El proyecto Guerreros por la alfabetización nace del diagnóstico que hizo la comisión que elaboró el Programa de Gobierno que presentó a los ciudadanos la coalición “Guerrero nos une” que postuló como candidato al actual gobernador del estado, luego se integró al Plan Estatal de Desarrollo aprobado por la Cámara Local de Diputados y el actual gobierno lo asumió como uno de sus programas prioritarios.
2.- Los datos duros que arroja la realidad de analfabetismo en nuestra entidad son alarmantes: Guerrero se ubica en el segundo lugar de analfabetismo en el país con un porcentaje de 16.7 de su población de más de 15 años de edad que son analfabetas –374 mil 327 personas–, sólo después del primer lugar que lo ocupa Chiapas con un porcentaje de analfabetas del 17.8, muy lejos de la media nacional que es del 6.9 por ciento, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Información y Estadística (Inegi) del censo del año 2010.
3.- Para impulsar este programa, el actual gobierno del estado en sus primeros meses de administración realizó un evento en el centro de convenciones de Acapulco, al cual asistieron representantes del Instituto Nacional para la Educación de Adultos; de instituciones de educación media superior y superior; de las iglesias; empresarios; de la sociedad civil; en donde se dio inicio a este proyecto, y se firmó un convenio con el gobierno de Cuba.
4.- En la instrumentación de este proyecto se incluyeron distintos métodos para alfabetizar como los de: Yo Sí Puedo –método cubano–, La Palabra Generadora y Alfabetizar para Humanizar; con el propósito de que diversas instituciones con experiencia en los procesos de alfabetización participaran en el programa y en el menor tiempo posible se lograran las metas de enseñar a aprender a leer y escribir al mayor número de analfabetas, para lo cual se destinaron recursos cuantiosos del presupuesto estatal.
En la parte operativa se designó a un coordinador que renunció, luego a otro que también dimitió recientemente, por lo que el gobernador decidió transferir el programa al Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos de Guerrero (IEJAG).
5.- El programa “Guerreros por la alfabetización” nació como un proyecto estratégico del actual gobierno, muy loable en términos de un compromiso profundamente social, pero en términos normativos tuvo una fuerte debilidad, ya que no se atendió la propuesta de institucionalizar este programa mediante un decreto o al menos un reglamento o un acto administrativo que estuviera dotado de las reglas mínimas de coordinación con otras entidades de la administración estatal y con la sociedad civil, en la organización, funcionamiento, responsabilidades de las diferentes estructuras del programa y relaciones laborales; por ello estuvo sujeto a permanentes improvisaciones que dificultaron su implementación, y está en riesgo de ser un fracaso.
6.- Transferir la responsabilidad del programa “Guerreros por la alfabetización” al IEEJAG es una solución formal al problema, pero esto no resolverá de fondo el analfabetismo en Guerrero, ya que esta dependencia tiene un programa de alfabetización –diríamos de rutina administrativa– con reglas y método propio único. Para la magnitud del asunto del combate al analfabetismo en nuestro estado se requiere mucho más, se necesita revitalizar el programa con nuevas normas y actores que asuman la alfabetización de los guerrerenses como una de las prioridades estratégicas para salir del atraso social, económico, cultural y político  de Guerrero.

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