Premian en Gales a Teresa Margolles por obra que denuncia la violencia en México

DPA

Londres / Cardiff

La artista mexicana Teresa Margolles conquistó el quinto Premio Artes Mundi 2012 para arte contemporáneo, según se dio a conocer ayer en Cardiff, Gales.
El galardón, que se concede cada dos años, está dotado con 40 mil libras (unos 64 mil dólares) y es el mejor dotado para el arte en el Reino Unido y también uno de los más relevantes en el mundo.
Las esculturas e instalaciones de Margolles se centran en la situación social en el norte de México, donde los crímenes del narcotráfico han desembocado en numerosos asesinatos y una agudización de la violencia.
Margolles, quien estudió medicina forense, ya se había destacado con sus exposiciones en el Guggenheim de Nueva York en 2005 y durante la Bienal de Venecia en 2009.
La artista nacida en 1963, originaria del estado de Sinaloa, aborda el impacto de la violencia en la sociedad mexicana y la muerte es uno de sus temas centrales.
A Venecia llevó ¿De qué otra cosa podríamos hablar?. Para construirla, la artista colgó en varios cuartos telas llenas de sangre de los asesinados en la frontera entre México y Estados Unidos.
El panel de jurados, encabezados por el curador y presentador Tim Marlow, elogió la obra de los siete nominados, pero se mostró particularmente impactado por el “poder visceral y la urgencia, así como la sofisticación” de la labor de Margolles, “al confrontar una tragedia humana actual”.
Desde hace más de dos décadas Margolles ha creado polémicas obras buscando materiales en las morgues como forma de denuncia, reflexión, solidaridad o interés por narrar la desgracia del otro.
Se inició en el arte en los años 90 con Semefo (Servicio Médico Forense), un colectivo artístico que usaba cadáveres animales o humanos para sus creaciones, descritas por sus participantes como aproximación estética a la muerte y sus implicaciones socioculturales.
Una muestra con obras de los siete aspirantes al galardón en el Museo Nacional de Arte de Cardiff atrajo durante las últimas semanas a unas 30 personas.