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Prevé el precandidato y alcalde de Altamirano una elección amenazada por la violencia

Israel Flores

Ciudad Altamirano

Gustavo Juanchi Quiñones, quien se acaba de registrar como candidato único a la diputación federal del distrito uno por el PRI, aseguró en conferencia de prensa que “será una elección delicada en materia de seguridad, y debemos de ser cautelosos”.
Juanchi Quiñones es alcalde de Pungarabato, con un permiso de 14 días para ausentarse en lo que atiende el tema de su registro electoral.
Expresó que ante los acontecimientos ocurridos en Michoacán, estado vecino de Altamirano, y el incremento de la violencia en la región, “será una elección delicada en materia de seguridad”.
“Yo creo por supuesto que puede haber esos riesgos, no lo podemos negar. Simplemente está el caso de Michoacán que acaba de pasar, la sociedad tiene temor. Nosotros no debemos nada y tenemos que seguir adelante”, expresó.
“Espero que de igual manera la campaña que se avecina pueda llevarla a cabo porque simplemente yo creo que todo mundo sabe que soy ajeno a los actos violentos, y espero que en mi campaña se refleje eso, y que no repercuta en los actos políticos”, indicó.
“Será una elección muy, pero muy especial. No sólo porque se definirán muchas cosas. Yo deseo que todo se lleve con calma. Yo creo que mi comportamiento, que llevo hasta ahorita, será el mismo. No pienso ponerme seguridad personal. No lo hice en toda mi administración, ahora menos”, dijo Gustavo Juanchi.
Insistió en que “la situación de Altamirano no es privativa de aquí, que además no depende de resolverse de un gobierno municipal. Tengo mi conciencia tranquila, creo en Dios”.
El aspirante a la diputación federal, consideró que todo lo que el gobierno federal pueda hacer para tranquilizar la violencia en la región “será bienvenido. Ya sean más policías, más soldados. Inversión social. Todo lo que se haga en pro de darle paz a la sociedad, que venga”.

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