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También es violencia que no reconozcan el arte y la lengua de las mujeres ñu savi, reclaman

Sergio Ferrer

Tlapa

Las mujeres na savi hacen arte no artesanía en huipil porque “duele la espalda, esta impreso el espíritu, la esperanza, la decisión de qué color, cuál iconografía, la simetría, es mi decisión mi poder lo hago con mi alma, espíritu, fuerza con esperanza de mujer de que alguien lo valore y tenga economía para mis hijos”, aseguró Ita Yuyu dirigente de la asociación civil Savi Yoko.
Ita expusó ante mujeres reunidas en un taller para eliminar la violencia contra las mujeres que también es violencia cuando se le tipifica incorrectamente a las mujeres guerrerenses así como al no reconocer que hablan una lengua y crean arte.
Recordó que cuando los españoles conquistaron América pusieron a los nativos nombres despectivos como mixteco que quiere decir hombre pata rajada maloliente, pachón, barrigón, no sirve, algo similar al decir tlapaneco por lo cual en un afán reivindicativo proponen llamen por sus propios nombres como naciones o pueblos que conforman México.
Aseguró que los pueblos hablan lenguas no dialectos porque tiene su propia escritura y lectura, señalando a las dependencias del gobierno que la nación de la lluvia, “los ñu savi, hablamos tu´un savi, las mujeres somos na savi y los hombres ta savi”.
La activista propuso no tipificarlos como pueblos indígenas porque también es racismo y discriminación y pidió que a las mujeres de los pueblos ñu savi, me´phaa, nahua o aztla y ñomndaa sean nombradas así y no aborígenes o incluso originarios, “estamos en contra de las fronteras y las tipificaciones que generan violencia” atajó.
Agregó que son na savi en sus pueblos y la región pero al hablar del estado son guerrerenses y en lo nacional mexicanas. En otro punto reiteró que sus dioses no son ídolos sino el dios sol, la madre tierra, el dios agua y las semillas que son las que dan la vida, “sin ellas no podemos vivir son parte de ese proceso natural sin el cual no fuéramos humanos.
En dos últimos puntos, pidió que no sea dicho que portan traje típico ni comida típica ya que es la comida que cada cultura ha tenido, pidió respeto para los médicos tradicionales, sicólogos, mujeres y hombres sabias.
Especificó que no se debe llamarles brujos o satanás, pues si bien así como en la medicina occidental hay charlatanes, lo cierto es que los pueblos sí cuentan con mujeres y hombres de conocimiento que deben ser respetados y reconocidos.

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