Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Toda la noche del martes siguieron llegando enfermos al hospital general

Luis Daniel Nava

Chilapa

Toda la noche del martes siguieron llegando enfermos al hospital general de esta ciudad, donde además se habilitó como albergue el auditorio municipal ante la magniutud que alcanzó la intoxicación masiva que al final, según cifras oficiales, llegó a las 709 personas.
La emergencia fue aprovechada por los precandidatos del PRI al Senado, René Juárez Cisneros y Claudia Ruiz Massieu, quienes se placearon por el auditorio y los pasillos del Hospital General.
En el transcurso de ayer, simpatizantes priístas y menores de edad de varias comunidades siguieron llegando para ser atendidos en el Hospital General.
La administradora del hospital, Antonia Jaimes, consideró que ayer llegaron entre 70 y 80 personas, mismas que al notar una mejoría fueron llevadas al albergue instalado en el auditorio municipal.
Al medio día, personal del hospital lavó, desinfectó y esterilizó los pasillos y los baños que se taparon en la noche del martes y la madrugada de ayer por vómito y diarrea.
En el auditorio, la cifra que daba personal de la Cruz Roja fue de alrededor de 800 personas intoxicadas de 19 comunidades.
Ayer a las 6 y media de la tarde, en el albergue aún permanecían dos menores de edad.
Sobre una colchoneta en el suelo, la joven familia Vargas Díaz, de la comunidad de Ayahualco, cuidaba a su pequeño hijo Jesús Alexis. La mamá, María de Jesús Díaz, narró que fue la única que acudió al mitin el martes en Chilpancingo, y que al regreso ella no se comió su taco de arroz con huevo y los guardó en su bolsa.
Una vez en su casa y sin que se percatara, su hija Jazmín y su hijo Jesús encontraron el taco y se lo comieron. Jazmín fue la primera que presentó calentura y vómito, y más tarde Jesús, a quien lo tuvieron que trasladar a Chilapa pero a una clínica particular porque el hospital ya estaba lleno.
En la clínica permaneció de las 7 a las 12 de la noche. Ayer por la tarde, en su comunidad, a media hora de distancia, de nuevo Jesús Alexis comenzó con dolor de estómago y a vomitar, por lo que de nuevo lo trajeron a esta ciudad donde los seguían atendiendo después de las seis de la tarde.
Antes, alrededor de las 4 de la tarde, los precandidatos al Senado por el PRI, René Juárez Cisneros y Claudia Ruiz Massieu y la diputada federal Alicia Zamora Villalva, acudieron al albergue y de ahí se trasladaron al Hospital General con el alcalde Sergio Dolorres con la parafernalia de los políticos, de caminar apresurados con sus asistentes y equipos de prensa siguiéndolos.
Cuando salieron del hospital, que sólo atendía a seis intoxicados y tras escuchar un reporte médico de cómo fue la contingencia del martes, a una enfermera se le preguntaron detalles de lo que hicieron los políticos priístas con los pacientes, y respondió: “Sólo se vinieron a hacer pendejos, vinieron a pasear… a hacer show”.
También fueron a la catedral de Chilapa, donde un devoto René Juárez se acercó al enorme Cristo que está en la parte principal del templo.

En tres días, los resultados de los análisis

La madrugada del miércoles, Rufino Silva Domínguez, director de Epidemiología de la Secretaria de Salud estatal, declaró que la mayoría de las personas que atendieron presentaron vómito, diarrea y dolor abdominal provocado por una bacteria.
Dijo que ya tenían muestras de las tortas y del arroz con huevo que fueron ingeridos al término del mitin priísta y que en tres días tendrían listos los resultados.
No obstante adelantó que de acuerdo a su experiencia, podría considerar que fue la comida de la tarde la que le hizo daño a la gente. “Creo que los tacos de arroz con huevo les hicieron daño”.
En tanto, el secretario de Salud, que llegó a las 2 de la madrugada del miércoles, dijo que la contingencia ya había sido controlada y que la mayoría de los intoxicados ya habían sido dados de alta del hospital y de las clínicas privadas, y que las cientos de personas que estaban en el albergue sólo estaban siendo rehidratadas.
Dijo que la Secretaria de Salud abasteció con medicamento y hay suficiente, porque el hospital no contaba con el necesario.
“Ningún hospital está preparado para recibir a 300, 400, 500 personas, me han informado que a las 9 de la noche era un caos”, dijo.
Consideró que la causa fue la comida que le dieron a la gente al terminar el mitin, “algo que les dieron, unos tacos de arroz con huevo, que al parecer fue la causa”.
–¿Y qué ha de haber sido, el arroz o el huevo? –preguntó un reportero.
–Están ya las muestras para revisar, no sabemos qué fue —contestó Mazón Alonso.
Cada taco de arroz con huevo y sus tres tortillas que proporcionaron los dirigentes priístas venía envuelto en una pequeña bolsa de plástico.

468 ad