No impulsa el gobierno estatal el estudio del jaguar; está en riesgo su conservación, advierte un especialista

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

El coordinador del proyecto autónomo Guerrero Jaguar, Fernando Ruiz Gutiérrez, reprochó al secretario de Medio Ambiente, Carlos Toledo Manzur que no impulsa el estudio del felino y en lo que va del año han sido sacrificados al menos tres jaguares y dos cachorros fueron capturados en la sierra de Petatlán.
En conferencia, consideró que si se invitiera en el estudio y conservación del animal emblemático de Guerrero, se podrían abatir los índices de violencia en la región que abarca comunidades y ejidos de Petatlán y Coyuca de Catalán.
Informó que en la sierra de Chilpancingo hay pruebas de que patrulla el felino pero no se ha estudiado y los pobladores están molestos porque se come el ganado, lo que lleva a la gente a cazarlo y podrían desaparecerlo.
Pero “a pesar de los esfuerzos que hemos hecho, las evidencias que hemos mostrado de la presencia del jaguar y otros felinos importantes en el estado, la Secretaría de Medio Ambiente del estado (Semaren) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que deberían de fomentar la protección, no tienen presencia”.
“Pareciera que ni a las autoridades federales, ni a las estatales les interesa la investigación y conservación del jaguar y no se diga a las municipales, hemos acudido con todos y nadie nos hace eco”, reprochó.
Se dijo preocupado porque “hay problemas serios de cacería de felinos, se está acabando con las zonas en donde habitan por la tala inmoderada y la cacería indiscriminada de las presas (del jaguar) y eso nos va a llevar a que esas especies de grandes felinos desaparezcan y sólo quedará el lamentarnos y decir que alguna vez tuvimos jaguar”.
Se le dijo que el titular de Semaren, Carlos Toledo Manzúr, le entregó dinero para financiar el proyecto de investigación del felino en la sierra de Petatlán y atajó que fue de manera parcial porque no cumplió con el monto acordado, al momento le debe 70 mil pesos, mismos que él adeuda por el pago a colaboradores, alimentación y transporte para la zona.
“Dice que tiene intenciones pero el apoyo ha sido muy poco, no tenemos un respaldo institucional, la Semaren debería estar al frente de la investigación o si no puede debería acompañarnos en el proceso, pero no contamos con ese respaldo”, expresó.
El acuerdo era que le darían 200 mil pesos para continuar los estudios del jaguar en la sierra de Petatlán, que es el único lugar en Guerrero donde se ha fotografiado un ejemplar vivo y la dependencia pagaría los gastos del estudio que el biólogo realizó con estudiantes de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), pero Toledo Manzúr no cumplió.
Fernando Ruíz realiza estudios del jaguar desde el 2009 en el estado y en 2011 presentó los resultados de la sierra de Petatlán, con la Organización de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán, que encabeza Eva Alarcón Ortiz, activista desaparecida desde finales de ese año.
En esa región, reconoció, hay un clima de violencia contra quienes buscan preservar los bosques y con ellos la flora y fauna, “la alternativa para la violencia ha sido desde el inicio que el gobierno les dé el respaldo, lo más viable es que se presente la información de lo que habita en el lugar”.
“Tenemos que apoyar los proceso de conservación de la gente, pero de manera institucional, si así como están, bajo la violencia, tienen un gran esfuerzo, si tuvieran apoyo, el proceso de conservación sería más fácil y se podría sacar del lugar a talamontes y quienes ejercen esa violencia”, consideró.
“Porque ahorita parece que no hay ley en la sierra, la salida es que participen las autoridades con la gente, ya estando en esos procesos se hace un diagnóstico de la zona, pero tienen que entrarle, es indispensable”, agregó.
Los estudios que tiene, agregó, arrojaron que es viable que se preserven 160 kilómetros cuadrados que abarcan ejidos de Petatlán “ahí se puede conservar ocelote, tigrillo, pumas, es un espacio que les permite movilidad”.
El biólogo añadió que el poryecto se podría extender a seis ejidos más del municipio de Coyuca de Catalán, como El Durazno, Río Frío, Corrales, San José de los Olivos y El Carrizal “si juntamos esos territorios, con voluntad, se podría proteger un área de 500 kilómetros cuadrados y es una buena región porque la gente ya está organizada y protege sus bosques”.
En cuanto a por qué no le han pagado el dinero que le deben, dijo “la excusa que nos dan en Semaren es que no hay dinero, nos dijeron que el gobernador (Ángel Aguirre Rivero) iba a aportar un millón y medio de pesos para seguir los estudios en Petatlán, que incluía un monitoreo y lo necesario para establecer un área de conservación en la zona”, expuso.
Pero de ese dinero no supo nada y el trabajo en la sierra quedó parado, “estamos a finales de año y el proyecto no avanza, no hemos podido presentarle los resultados a las comunidades que nos apoyaron”.
También, comentó que en la sierra de Chilpancingo hay pruebas de que existe el jaguar pero no ha podido iniciar con el estudio porque la Semaren no libera el dinero que les adeuda, “ahí tampoco nos ha querido ayudar, sabemos que en la sierra de Chilpancingo hay jaguar, tenemos evidencia de que patrulla en la zona de los Pueblos Santos pero no hay apoyo institucional”. Advirtió que se corre el riesgo de que los pobladores acaben con el felino si no se les capacita en el cuidado y se les paga el ganado que pierden por depredación, “se podrían sacrificar los pocos jaguares que hay porque hay muchos reportes de ataques a sus animales domésticos”.
En ese sentido, dijo que tiene reportes sobre el sacrificio de jaguares “en Petatlán nos notificaron de tres jaguares en un año, hace tres meses nos informaron que capturaron un par de cachorros y querían ver la posibilidad de rescatarlos porque la gente no podía mantenerlos porque comen demasiado. El problema es que para capturarlos seguramente mataron a la madre”.