Favorecen en Zihuatanejo la liberación de policías que mataron a un menor, denuncian

Noé Aguirre

Zihuatanejo

El caso sobre la muerte del menor Alexis Hernández Aparicio, que de acuerdo con testigos fue asesinado por policías municipales de Zihuatanejo, se encuentra plagado de irregularidades que favorecen la liberación de los uniformados, señaló la madre de la víctima, Benita Aparicio Aguilar.
Alexis Hernández Aparicio era un adolescente de 16 años que murió de un disparo cuando supuestamente huía de los policías municipales Jesús Hernández Barrientos, Roque Nava Quinarez, y Salvador Martínez Ponce, el 7 de enero sobre el Paseo del Pescador en la playa La Madera.
La víctima iba acompañada de dos amigos que testificaron que fueron los policías quienes dispararon, luego el par de jóvenes fueron detenidos y torturados por policías ministeriales para que no acusaran a los municipales.
Los anterior fue denunciado por los afectados, y sus familiares también dieron a conocer que en el Ministerio Publico pedían 20 mil pesos para ser liberados, pero como no accedieron, los trasladaron al tutelar de menores en la capital del estado, días después los liberaron porque no había de qué acusarlos.
La pareja a la que presuntamente asaltó Alexis Hernández nunca pudo comprobar que fue el menor, y se conoce que ya no pueden ser localizados.
Entre las irregularidades del proceso, la madre de Alexis dio a conocer que el perito de balística Sergio Arturo Cortez, quien no pudo determinar el calibre del proyectil que mató a Alexis, ha sido llamado a declarar en cuatro ocasiones y no se ha presentado.
Debido a esta situación, los policías señalados de disparar contra el menor interpusieron un amparo en el que alegan que “no existen datos para acreditar que precisamente la muerte del citado haya sido provocada precisamente por los disparos que dicen los de cargo realizamos en los momentos de la detención”.
Otra de las irregularidades es que en el certificado médico legal de necropsia que entregó el jefe de peritos, Miguel Martínez Cordoba, indica “heridas causadas por proyectil de arma de fuego penetrante en el abdomen”, cuando la herida de bala fue con entrada en la espalda baja, como lo asegura la madre de Alexis quien revisó el cuerpo de su hijo cuando se lo entregaron, además de que existen fotografías.
Benita Aparicio dijo que en las copias del expediente que solicitó no venían fotografías del cuerpo de su hijo con la entrada de bala en la espalda, pero en una revisión posterior en el expediente original y frente a testigos, descubrió que existen fotografías que muestran que la entrada de bala es por la espalda, lo que echa abajo el reporte de la necropsia que entregó Martínez Cordoba, mismo en el que los policías acusados se basan para solicitar el amparo.
La entrevistada señaló que una prueba clave que demuestra que a su hijo le dispararon por la espalda, es la ropa que vestía, la cual pidió al Ministerio Público, pero este desde el principio se ha negado a entregársela.
Otra de las situaciones que de acuerdo con la quejosa, han entorpecido el proceso, es que en dos ocasiones le han cambiado de abogado defensor sin que sea avisada de manera oficial, pues se entera cuando llega al juzgado y le informan que ya es otro abogado defensor el que lleva el caso.
Aparicio Aguilar señaló que lo descrito son sólo algunas de las inconsistencias del caso, pues está plagado de ellas, también informó que interpuso una denuncia en la Coordinación Regional de Costa Grande de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos.
En la denuncia, la quejosa exige que “se sancione a los servidores públicos dependientes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Guerrero, por haber violentado los derechos humanos de mi hijo, al encubrir, beneficiar y no llevar un proceso de investigación apegado a derecho como lo marca la ley”.