Rebeldes sirios tratan de tomar Damasco; preparan el derrocamiento de Bashar al Assad

DPA

Damasco / Estambul

Los rebeldes sirios se preparan para el derrocamiento del presidente Bashar al Assad mientras los combatientes del Ejército Libre de Siria (ELS) intentan tomar la capital Damasco.

Los altos mandos del Ejército Libre Sirio (ELS) estudian crear una nueva estructura de mando, según fuentes opositoras al presidente.

Los desertores quieren elegir en la ciudad turca de Antalia una cúpula para el Estado Mayor que también dirija el Ejército tras la caída del régimen actual. Sin embargo, una unidad de los rebeldes de la ciudad de Deir as Saur, en el este del país, ya ha señalado que no está dispuesta a reconocer ese nuevo mando.

Observadores independientes estiman que con la creación de una estructura de mando adecuada, el ELS quiere impedir que se les imponga otra cúpula que sea más del agrado con los ex socios de Al Assad, China y Rusia.

Las manifestaciones celebradas tras el rezo del viernes llevaban ayer como lema: “No a las tropas de paz en suelo sirio”. “La comunidad internacional no nos ayudó hasta ahora, así que tampoco necesitamos que vengan ahora a proteger a los seguidores del régimen de Al Assad”, dijo un disidente.

Entretanto, en El Cairo continúan las negociaciones de la oposición sobre la formación de un posible gobierno de transción. Entre las cuestiones más controvertidas está la inclusión o no en el futuro gobierno del ex primer ministro sirio Riad Hijab, una opción sugerida por algunos aliados de la oposición para facilitar posteriormente una reconciliación nacional.

En la jornada de ayer los combates entre insurgentes y las tropas del gobierno se centraban sobre todo a las afueras de Damasco. Los insurgentes publicaron un video en el que se ve un tanque confiscado en la localidad de Harasta. El jueves murieron en Siria más de 80 activistas, según fuentes activistas, y el viernes se registró un número similar de víctimas, la mayor parte de ellas en las inmediaciones de Damasco.

Los rebeldes declararon zona militar el área que rodea el principal aeropuerto de la capital, advirtiendo que los aviones que lleguen a Damasco deben evitar la zona. Las tropas de Al Assad lanzaron un contraataque contra zonas rebeldes .

Por otro lado, Rusia acusó a la OTAN de inmiscuirse en el conflicto sirio con el acuerdo de estacionar los misiles Patriot en Turquía. “Vemos el peligro de otra participación de la OTAN como resultado de provocaciones o de incidentes en la frontera”, dijo Grushko.

Precisamente Holanda anunció ayer el envío a Turquía de dos unidades Patriot con hasta 360 soldados, que se estacionarán en la frontera con Siria. “Si Turquía nos pide ayuda tenemos que ayudar a un miembro de la OTAN”, explicó el ministro de Exteriores holandés, Frans Timmermans, quien hizo de nuevo hincapié en que se trata únicamente de operaciones de defensa.