Llaman en foro de perredistas a no permitir acuerdos entre cúpulas que van contra ideales

Sergio Ferrer

Tlapa

Pablo Abad Díaz, militante del PRD, planteó a perredistas convocar a la desobediencia civil pacífica como muestra de inconformidad ante el arribo de Enrique Peña Nieto a la Presidencia de la República.
Por otra parte, militantes llamaron a no permitir más los acuerdos entre cúpulas que se reparten los puestos de poder y resquebrajan los ideales del PRD.
Con un máximo de 100 asistentes, se realizó en esta ciudad el foro regional convocado por ex dirigentes y ex presidentes estatales del PRD, en el cual militantes expusieron dudas, críticas y propuestas ante un partido que está “fuera del rumbo que le dio origen”.
Un día antes, la corriente Grupo Guerrero convocó a una reunión que estuvo coordinada por Antonino Romano y a la que acudirían David Jiménez Rumbo Celestino Cesáreo aunque no convocaron a medios. “Sólo supimos que fue una reunión de análisis y evaluación”, atinó a decir un integrante del comité municipal provisional del PRD en Tlapa.
Abad Díaz expuso que La Montaña adolece de políticos honestos, porque “se ha perdido el rumbo con el que creció el partido, dejando de lado los principios de las luchas sociales; el PRD está divorciado de los movimientos campesinos, obreros o sindicales siendo sólo un partido electorero”.
El también maestro propuso a perredistas declararse en resistencia civil pacífica, ejecutando acciones como el no hablar por celular, no ver televisión, no pagar impuestos, no mandar a los hijos a la escuela como estrategia pacífica para “repudiar la imposición de un ilegítimo Peña Nieto y lograr tumbarlo”.
Abad Díaz recordó que a la marcha convocada el 1 de diciembre aquí, contra Peña Nieto, acudió poca gente quizá porque no hubo comida ni regalos, porque “ya la gente se acostumbró a marchar sólo cuando hay candidatos”.
Criticó que el partido se haya convertido en una  franquicia para los dirigentes en el poder, que se disputan entre sus grupos los puestos de elección popular, utilizando a la militancia como escalera política.
A decir del militante, las corrientes políticas han llegado a dividir los esfuerzos de los luchadores sociales creando políticos chapulines, clientelismo y un círculo vicioso, donde los candidatos se preguntan cuántos votos obtendrán, cuánto dinero obtendrán, cuánto deben invertir y cuánto tendrá que pagar al llegar a ocupar el cargo.
Propuso reorientar las prácticas políticas, construyendo un partido de izquierda que abandere las luchas sociales.
En su participación, Ranferi Hernández, ex presidente del Comité Ejecutivo Estatal, enarboló la lucha de Othón Salazar como el máximo símbolo de la izquierda en la región, dentro de la cual Alcozauca fue base de la izquierda socialista, teniendo el primer Ayuntamiento comunista del país. Actualmente ese municipio está gobernado por el PRI.
Hernández dijo reconocerle al Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, el sortear acosos y persecuciones por parte de grupos caciquiles de la región y estatales, siendo un ejemplo de defensa de los derechos humanos de los migrantes, las comunidades en defensa de sus recursos naturales y la búsqueda del respeto a los derechos humanos más elementales.
Agregó que son un punto de defensa ante los ataques de las transnacionales mineras, el acoso de la delincuencia organizada y el gobierno. En cuanto a la participación del PRD dentro de la lucha social, afirmó como importante combatir la descomposición del tejido social comunitario.
Alertó que a la izquierda se le esta debilitando, dividiendo a las comunidades con elementos que corrompen y se infiltran, causando problemas en las familias y en las organizaciones comunitarias.
Entre acusaciones de que el PRD ha perdido el rumbo de lucha social y que las corrientes no han abonado a la construcción del partido, una ponencia denunció la exclusión, marginación y violencia que sufren las mujeres.
En un claro ejemplo de la violencia contra la mujer, se mencionó a la campesina ecologista asesinada junto a su hijo, Juventina Villa, pidiéndose el esclarecimiento de su asesinato y justicia. Otro punto criticado fue la falta de representatividad de las mujeres en cargos públicos.
El también ex presidente estatal Misael Medrano Baza, al participar, propuso institucionalizar un sistema ciudadano de seguridad pública, citando el caso de la Policía Comunitaria. Criticó además que el presupuesto asignado a los ayuntamientos para seguridad, se gasta gran parte en el pago de alumbrado público a CFE, aunque en los recibos particulares se cobra también, por lo que “es necesario que se frene esa situación de saqueo”, dijo.
También llamaría a estar atentos a la llegada de un presidencialismo todopoderoso, de concretarse modificaciones a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ante el pacto de carácter inédito que ha presentado el gobierno federal.
Al acto acudieron, además de militantes, el secretario de Sa-lud, Lázaro Mazón; el diputado federal Vicario Portillo;  el alcalde de Huamuxtitlán, Jonhy Saucedo; el presidente del CEE del PRD Saúl López Sollano; el ex presidente del Consejo Estatal Mauro García, la diputada suplente Fredislinda Váz-quez; el ex subsecretario de Gobierno Víctor Aguirre Alcaide;  los síndicos de Mali-naltepec y de Xalpatláhuac y  algunos líderes regionales.
Afuera del salón, en el que se efectuó el acto, se observó una camioneta con logotipos del gobierno del estado, funcionando en día inhábil.