El ex subprocurador Alejandro Hernández es víctima de García Luna, acusa su madre

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El ex subprocurador de Justicia, Alejandro Paz y Puente, preso por presuntos delitos contra la administración de justicia al presuntamente haber dejado en libertad a los estudiantes detenidos después del desalojo violento de normalistas de Ayotzinapa, el 12 de diciembre del año pasado, fue víctima y un “chivo expiatorio” del ex secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, denunció ayer su madre Lilia Paz y Puente.
A un año del desalojo, y a cinco de la detención del ex subprocurador, la madre del ex funcionario demandó, por ello, la intervención del gobernador Ángel Aguirre Rivero para que recobre su libertad antes de la Navidad, pues insistió en que es inocente.
Alejandro Paz y Puente fue detenido el 5 de julio pasado por la misma causa que la agente del Ministerio Público del Fuero Común (y presa también), Rocío Cruz Méndez.
Ambos fueron responsabilizados de la liberación de los 24 estudiantes detenidos en el desalojo, entre ellos el normalista a quien se le pretendió inculpar mediante tortura en la portación de un rifle AK-47.
Entrevistada ayer en su domicilio particular, la señora Paz y Puente dijo que su hijo dejó de “mover” su caso (él mismo asumía su defensa), precisamente porque observó que había consigna para mantenerlo detenido, “había una sistemática negativa a todas sus actuaciones desde el Juzgado de Distrito y con los magistrados, seguramente por indicaciones de García Luna”, acusó.
Dijo que el funcionario federal quería un “chivo expiatorio” y justificar que estaba actuando, “por eso mi hijo dejó de mover su caso, porque sistemáticamente, solicitud que metía, solicitud que le negaban; es increíble, da tristeza que un fuero federal sea tan arbitrario. Yo lamento todo lo que le pasó”, manifestó.
Explicó que su hijo fue acusado y detenido sólo porque en su declaración una Ministerio Público dijo que él le había dado órdenes de que soltara a los estudiantes de Ayotzinapa, “pero eso solamente es un dicho de una Ministerio Público, que lo pudo haber ocupado para salvarse de la orden de aprehensión, aunque le falló porque anda prófuga”, explicó, y se reservó el nombre de la funcionaria.
Paz y Puente aseguró, sin embargo, que su hijo nada tuvo que ver, pues quien firmó la libertad de los detenidos fue la agente del Ministerio Público Rocío Cruz Méndez, quien también se encuentra detenida, “pero mi hijo no dio órdenes de nada, él me lo ha dicho, pero mi hijo está preso”.
Insistió en que su hijo es víctima de García Luna, “él es el que ordenó su detención”, y explicó que por lo pronto está detenido su proceso judicial y que espera que el gobernador Ángel Aguirre Rivero intervenga y le pida al presidente de la República que revise su expediente, “porque mi hijo no puede estar detenido sin ser culpable de nada”.
Reiteró que no existen pruebas fehacientes de que su hijo ordenó la libertad de los estudiantes, y que está preso solamente “por un dicen que me dijeron que dijiste”.
Paz y Puente dijo que tiene la esperanza de que con el cambio en el gobierno federal salga su hijo en libertad, “porque yo veo que Enrique Peña Nieto sí tiene las agallas para hacer justicia, lo he visto en el caso de los maestros al no permitirles que hereden sus plazas”.
Comentó que su hijo está mal física y emocionalmente porque sabe que está pagando un delito que no cometió, “ya está enfermo, le han dolido mucho las piernas, desgraciadamente le cayó azúcar por tanto coraje, por tanta cosa que le han hecho las autoridades, por eso yo le suplico al señor gobernador, como padre que es, que no permita que mi hijo pase la Navidad en una cárcel en donde no debe de estar”, concluyó.