Ministro griego: las nuevas medidas de ahorro serán “dolorosas”

DPA

Atenas

El primer ministro de Grecia, Lucas Papademos, advirtió ayer a la población de las devastadoras consecuencias que tendría que el país se declarara en quiebra, e instó a sus compatriotas a aunar esfuerzos para poder poner en práctica los recortes exigidos por la UE, el FMI y el BCE.
El paquete de ahorro incluye medidas que los griegos deberían haber tomado “mucho antes por su cuenta”, dijo el jefe de gobierno en relación con las medidas que serán sometidas a votación en el parlamento este domingo y que son exigidas por la “troika” como requisito sine qua non para otorgar el próximo paquete de ayudas al país heleno.
Las medidas son muy duras, destacó Papademos, y exigirán “un doloroso esfuerzo a los griegos”.
Si Grecia no implementa el paquete en el plazo estipulado, no obtendrá los próximos 130 mil millones de euros de la “troika”, esenciales para evitar declararse en quiebra este 20 de marzo.

Advierte Alemania: “Lo único que cuenta son los hechos”

En Berlín, el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle, se sumó ayer a las advertencias a Grecia a cumplir con los compromisos de ajustes como condición para que le sean otorgadas nuevas ayudas internacionales que la salven de la bancarrota.
“Grecia podrá contar con nuestro respaldo cuando se hayan sentado las bases de forma adecuada y duradera, pero sólo después de eso”, dijo Westerwelle en una entrevista que adelanta hoy el semanario alemán Der Spiegel.
Westerwelle sostuvo que el objetivo es claramente mantener a Grecia dentro de la eurozona.
Pero “no alcanza con disponer programas de reforma sino que es necesario comenzar a aplicarlas sin demora. No en algún momento, sino ahora”, apremió.

Prosiguen las huelgas

Cuando falta sólo un día para que el Parlamento griego someta a votación un nuevo paquete de ahorro, las calles de Grecia vivieron una segunda jornada de huelga convocada por los sindicatos, mientras en los pasillos del gobierno los líderes del ala conservadora y socialista instaban a sus agrupaciones a respaldar las nuevas medidas de recorte.
El líder de los conservadores, Antonis Samaras, pidió a los parlamentarios de su partido un claro respaldo a favor del paquete, exigido con urgencia por la “troika” de la Unión Europea (UE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE) como requisito para otorgar el próximo paquete de ayudas.