Celebra Jesús Mendoza que el plan de Peña Nieto contra el crimen considere la prevención

Mariana Labastida

El encargado de la pastoral social de la Arquidiócesis de Acapulco, Jesús Mendoza Zaragoza, consideró favorable que en las líneas de acción de la nueva política de seguridad anunciada por el presidente Enrique Peña Nieto se incluya la prevención de los delitos y la división en regiones operativas para atender el eje de protección y respeto a los derechos humanos.
Consultado vía telefónica respecto a la presentación de las seis líneas de acción del gobierno federal para abatir la inseguridad, entre las que se contempla una Gendarmería Nacional en su primera etapa, Mendoza Zaragoza dijo que se incluyen aspectos no contemplados por el gobierno federal anterior, como la  supervisión de las tareas de los gobiernos estatales y municipales, lo cual se consideraba pero no se cumplió, dijo.
Resaltó de los seis puntos el segundo, que se refiere al plan de prevención del delito, “en cuanto a que se vayan tocando los factores de la violencia que son a largo alcance, si se toma en cuenta la prevención significa un avance”, expuso el sacerdote.
Consideró importante que se esté contemplando la operación de centros regionales, así como la ampliación de la coordinación para trabajar directamente en los estados y municipios.
En cuanto a lo que declaró Peña Nieto, que no se improvisará, Mendoza Zaragoza expuso que “lo que diga está bien, pero quién sabe hasta dónde se pueda llevar”, y recordó que el ex presidente Felipe Calderón improvisó y eso “ha significado un altísimo costo para el país, pues ojalá que signifique que no se va a improvisar”.
Sobre el hecho de que en su discurso Peña Nieto no haya utilizado palabras como narcotráfico, crimen o delincuencia organizada, el sacerdote dijo que la violencia tiene una serie de actores, siendo el más fuerte el crimen organizado.
“Lo importante es que se ataquen los factores de violencia y no se puede soslayar a los grupos criminales, que por lo visto se han fragmentado”, señaló.
Agregó que aunque no se mencionen por su nombre las causas de la violencia, “todo mundo lo sabe, desde ellos hasta la población”.