Aprueba Madrid un polémico plan privatizador en la sanidad pública

DPA

Madrid / Barcelona

El Parlamento regional de Madrid dio ayer luz verde a un plan privatizador de la sanidad pública que tiene desde hace semanas en pie de guerra a los médicos de la comunidad autónoma situada en el centro de España.

La Asamblea de Madrid, gracias a la mayoría absoluta con la que cuenta en ella el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy, aprobó una ley que permitirá privatizar la gestión de seis hospitales y 27 centros de salud, el 10 por ciento de los que tiene la región, de 6.5 millones de habitantes. Toda la oposición votó en contra de la ley.

Esos hospitales y centros de salud seguirán siendo de acceso gratuito para los ciudadanos, pero su gestión quedará en manos de empresas.

Según el Ejecutivo regional, presidido por Ignacio González, del PP, la crisis económica y la reducción del presupuesto sanitario que se deriva de los recortes contra ella lo han llevado a tomar esa medida para ahorrar.

Médicos y otros profesionales de la sanidad pública, junto a ciudadanos, aseguran que la privatización mermará la calidad de la sanidad pública. Los trabajadores de la sanidad pública de otras regiones españolas temen que el ejemplo de Madrid pueda aplicarse después en ellas.

Los médicos de la Comunidad de Madrid llevan ya cinco semanas en huelga y también ha habido manifestaciones y encierros en contra del plan del gobierno regional, que presentó por sorpresa en octubre y sin haber contado con el sector para elaborarlo. Los sanitarios y la oposición creen que detrás de estas medidas hay un planteamiento ideológico que se quiere imponer aprovechando la crisis económica.

Artur Mas forma gobierno de marcado perfil político para la secesión

El presidente del gobierno regional de Cataluña, Artur Mas, presentó ayer su nuevo gabinete, un Ejecutivo de marcado perfil político para gestionar el proceso independentista que ha abierto en la región del noreste de España.

Tres días después de asumir el cargo de jefe del gobierno catalán por segunda vez, Mas incorporó cinco caras nuevas en su Ejecutivo, que pasa a estar compuesto por 12 consejeros, uno más que en la legislatura anterior. Los cambios más significativos fueron cambios de cartera.

Dos miembros del gabinete, cuya toma de posesión estaba prevista para la tarde de ayer, emergen como hombres fuertes, uno en el ámbito económico y el otro en el político.

El primero es Andreu Mas-Colell, que en los dos años anteriores fue el responsable de los ajustes del Ejecutivo catalán, con drásticos y criticados recortes frente al déficit. En el nuevo gobierno mantiene la cartera de Economía.

El segundo es Francesc Homs, hasta ahora portavoz del Ejecutivo sin cartera. En el nuevo gobierno asume el control político después de que Mas haya otorgado al departamento de Presidencia el rango de consejería.