Protestan en el Palacio alumnos del Tec de La Montaña; se rechaza su propuesta de cuotas

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Alumnos del Instituto Tecnoló-gico Superior de La Montaña (ITSM) protestaron en el Palacio de Gobierno para exigir la reducción de cuotas escolares, mientras que en el interior del edificio sesionaba, de forma cerrada, la Junta Directiva del organismo, encabezada por la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez.
El ITSM se encuentra en paro de labores desde el 20 de noviembre, cuando maestros exigieron la firma de un nuevo Contrato Colectivo de Trabajo, luego de 20 años de servicio, y que acaban de depositar ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.
Una semana después que los maestros, los estudiantes comenzaron un movimiento paralelo por la reducción de cuotas de inscripción, de cursos obligatorios y de servicios de fotocopiado e Internet, por arriba de las tarifas comerciales.
De acuerdo con informes financieros presentados por los estudiantes, el instituto recauda más de 7 millones anuales por cuotas y servicios de los alumnos, pero los directivos sólo reportan a la Junta Directiva del ITSM alrededor de 2 millones de ingresos propios.
En la sesión cerrada, la Junta Directiva del ITSM escuchó a dos estudiantes que expusieron sus demandas y pidieron que las cuotas de inscripción y reinscripción, por las condiciones de marginación y pobreza en la región, fueran de 100 pesos, pero la propuesta fue rechazada por los funcionarios que, tras retirarlos, continuaron la reunión.
Por la tarde, el subsecretario de Educación Media Superior y Superior de la SEG, Marcial Rodríguez Saldaña, informó que se acordó con los estudiantes la reducción de la cuota de inscripción y del curso de ingles obligatorio en un 50 por ciento, así como la reanudación de clases el próximo lunes 9 de enero.
Los jóvenes llegaron a las 11:30 de la mañana al Palacio de Gobierno y protestaron con pancartas por la reducción de cuotas, en una de ellas decía: “Mientras unos se llenan los bolsillos… otros vacían los suyos para seguir estudiando”.
Los costos de la educación, de acuerdo con los jóvenes, son la inscripción o reinscripción y el curso de inglés obligatorio al comenzar el semestre, suman mil 350 pesos; los cursos  especiales y de recuperación, 6 mil 50 pesos, que se puede dividir entre dos y hasta 10 alumnos para cubrirlo, pero si son 11 o 20 los estudiantes registrados, se establece una cuota por alumno de 650 pesos.
De estos cursos, detallaron, sólo la mitad se paga al maestro que lo imparte, la otra es para la escuela. Se mencionó también que las cuotas del curso de inglés estaban destinadas a pagar salarios de los maestros, que hace tres o cuatro años están en la nómina del ITSM y no se había notificado a los estudiantes.
Sobre los servicios, se informó que mientras en la escuela la copia de un plano cuesta 80 pesos, en el centro de Tlapa se obtiene en 30; en cuanto al Internet, con un costo de 5 pesos hasta una hora de uso en el centro de cómputo, anteriormente se acordó con autoridades educativas que el servicio sería gratuito, pero a partir de esta decisión, el centro no ha tenido el servicio de navegación en la web.
Asimismo, se informó que el tecnológico con sede en Tlapa de Comonfort, y las subsedes en Olinalá e Iliatenco, suman más de mil 200 alumnos inscritos, pero por las cuotas de inscripción existe un alto nivel de deserción.
El estudiante Ignacio Vega Martínez se quejó de que desde que comenzaron su movimiento, las autoridades educativas no los tratan con seriedad, se han reunido en diferentes ocasiones, pero dicen que no tienen facultades para reducir las cuotas que estableció el anterior director de la institución.
El joven exigió que directivos y funcionarios dejen de ver al ITSM como una empresa para sacar dinero de los estudiantes.
Después de las 3 de la tarde, vía telefónica, Rodríguez Saldaña informó que tras la sesión de la Junta Directiva, se reunió con los manifestantes en el Palacio de Gobierno para firmar una minuta de acuerdos, donde se estableció la reducción de la cuota de inscripción y del curso de inglés obligatorio en un 50 por ciento, y el retorno a las aulas por parte de los alumnos y docentes.