Recibió Asuntos Religiosos 15 denuncias de sacerdotes que fueron extorsionados en 2012

Yee Trujillo

El subsecretario de Gobierno para Asuntos Religiosos, Jorge Alberto González Rivero, informó que durante 2012 la dependencia a su cargo recibió denuncias de sacerdotes por unas 15 llamadas de extorsión en el estado, principalmente en Acapulco, Tierra Caliente y La Montaña, y dijo que buscarán impartirles cursos en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil del gobierno del estado (SSPYPC).
En entrevista en un restaurante de la Costera, el funcionario estatal explicó que ocurrieron unos diez casos principalmente en la región de Tierra Caliente, donde el obispo Maximino Martínez Miranda le ha comentado “que existe mucha preocupación por parte de los padres”, así como en parte de La Montaña, y recordó el caso del padre de Chilapa que permaneció secuestrado en un hotel por amenazas telefónicas.
“Yo llevo ese tema con los curas que sí han tenido, aquí en Acapulco sobretodo, muchas llamadas de extorsión que muchas veces termina solamente en eso, en llamadas”, afirmó y detalló que el año pasado en el puerto le reportaron unos cuatro o cinco casos pero que en estos primeros días del año no se ha registrado ninguno.
Al mencionarle que en noviembre ocurrieron más de una docena de casos de extorsiones a sacerdotes en Acapulco, afirmó que esto fue comunicado inmediatamente a la SSPYPC para su atención y el seguimiento adecuado.
A pregunta expresa sobre qué ha hecho el gobierno del estado para tratar de evitar estos actos, González Rivero dijo que han tratado de asesorar a los sacerdotes para que marquen al número telefónico 066 inmediatamente, se acerquen a la SSPYPC y a la Secretaría General de Gobierno como un vínculo para dar seguimiento a estos asuntos, y afirmó que algunos casos están siendo investigados.
“Ellos han contribuido bastante en el fortalecimiento del tejido social desde su sector, desde lo que ellos manejan mejor que es con la feligresía de sus iglesias, y la verdad es que el trabajo que ellos están desarrollando pues no se puede pagar con nada”, afirmó en relación a los obispos de las diócesis de Ciudad Altamirano, Chilpancingo-Chilapa, Tlapa y Acapulco, Maximino Martínez Miranda, Alejo Zavala Castro, Roberto Domínguez Couttolenc y Carlos Garfias Merlos, que ayer en estas páginas se informó que lamentaron que la violencia ponga en crisis a la sociedad y reiteraron que inclusive los integrantes de la iglesia han sido víctimas de robos, extorsiones y secuestros vía telefónica.
González Rivero agregó que entre las principales recomendaciones para los sacerdotes se encuentran informar a la dependencia inmediatamente para “tener un panorama de qué tipo de delincuencia es la que está contactándolos”, y buscar qué tratamiento se dará a los casos en coordinación con los expertos de la SSPYPC.
“Tenemos como proyecto de trabajo para este año, principalmente dar cursos, talleres de información en referencia a los conflictos de intolerancia religiosa pero ahí mismo vamos a tratar de meter información por parte de Seguridad Pública, vamos a informarle al señor secretario de Gobierno (Humberto Salgado Gómez) para que nos autorice que tuviéramos ahí un apartado en estos cursos y poderles dar alguna información adicional”, destacó.
Lamentó que en muchas ocasiones, los sacerdotes no piden apoyo porque desconocen la existencia de la Subsecretaría de Gobierno para Asuntos Religiosos por lo que llamó a los líderes religiosos a acercarse a la dependencia que también funciona para gestionar equipo y mobiliario para las iglesias y agilizar trámites como el registro en la Secretaría de Gobernación.
En este sentido, González Rivero acentuó que el año pasado en las instalaciones de Casa Guerrero el gobernador, Ángel Aguirre Rivero, y funcionarios del gobierno del estado se reunieron con unos 80 líderes religiosos no católicos y que este año tratarán de tener más acercamiento con otras religiones que son minoría en comparación con la católica pero no deben ser desatendidas.

Los conflictos religiosos son por intolerancia, dice subsecrtario

A pregunta expresa sobre si existen conflictos religiosos en el estado, González Rivero aseguró que estos no son graves sino manejables, y se presentan en Costa Chica, La Montaña, Tlacochistlahuaca e Igualapa, principalmente por intolerancia religiosa.
“Un caso muy común es de que el comisario de la comunidad obliga a ser de mayordomo de equis fiesta a una persona que no es católica, básicamente esos son los conflictos que se dan, no se dan conflictos tal vez como el caso de Michoacán que es ahí fanatismo religioso, pero precisamente para prevenir estas situaciones nosotros tenemos muy buena comunicación con los diferentes presidentes municipales y comisarios para que inmediatamente si se presentara alguna situación de intolerancia o fanatismo pues nosotros inmediatamente lo tratamos con diálogo”, explicó.
En este sentido, detalló que el año pasado se registraron unos 20 conflictos por intolerancia religiosa de los cuales unos cuatro continúan en proceso de resolución, como el caso de un habitante de la localidad de Chilixtlahuaca en Metlatónoc que se negó a aceptar una mayordomía y ahora los habitantes no le permiten que viva ahí.
“Tenemos otro ejemplo de que en Chilpancingo está una iglesia católica, la torre de San Antonio, no podemos poner como un conflicto pero la gente nos dice que los apoyemos para que se arregle su torre de la iglesia pero ahí mismo en la iglesia, pues muchas veces entre los mismos feligreses pues ya crean conflicto porque se pelean con el padre”, agregó.