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Citó la PGJE a Hernández Cardona a declarar sobre el asesinato de Rosales; es para intimidarlo, dice

Fernando Hernández

Iguala

El dirigente de la Unión Campe-sina Emiliano Zapata (UCEZ), Arturo Hernández Cardona, de-nunció que la Procuraduría Gene-ral de Justicia (PGJE) lo llamó a comparecer hoy en el Ministerio Público de Coyuca de Catalán, por el asesinato del lopezobradorista Andrés Rosales Aguirre, “para que desista de denunciar que su homicidio fue un crimen político como el de Armando Chavarría, y el de Manuel Ponce Rosas y Raúl Lucas Lucía”.
En conferencia de prensa, el ex secretario estatal de Derechos Humanos del PRD exigió “a las autoridades estatales y federales las condiciones necesarias que garanticen mi vida, ya que en Guerrero ha quedado demostrado que los testigos, aunque sean protegidos, en este tipo de casos han sido asesinados”.
De acuerdo con la  notificación de la averiguación previa MIN/SC/0014/2013, el alcalde de Cutzamala, Isidro Duarte Cabrera, también será citado a declarar por las investigaciones que se siguen por el asesinato del ex perredista.
Rosales Aguirre fue asesinado a balazos el 13 de enero, mientras trabajaba en un campo de cultivo en la colonia El Capire, en el municipio de Cutzamala, región de Tierra Caliente.
“Andrés fue pieza clave en la construcción de lo que hoy es el PRD, formó parte de la resistencia cardenista, y en fechas recientes había decidido irse al partido Morena, estaba inconforme como muchos de lo que algunos dirigentes y actores políticos han hecho del PRD”, acotó.
El dirigente mencionó que “el llamado que nos están haciendo es para que nosotros dejemos de decir que fue un asesinato político. No nos vamos a retractar, vamos a seguir reivindicando la muerte de nuestro compañero como un crimen político”.
Según Hernández Cardona la Procuraduría está siendo usada como un instrumento de coacción, “para que las voces críticas no griten que en Guerrero no hay condiciones para los defensores de los derechos humanos y los que di-sienten de la política establecida”.
Dijo que el asesinato de Andrés Rosales “pudo haber sido preventivo, ya que siendo él una persona dedicada al campo y a la lucha campesina, seguramente iba a movilizar a la gente para exigir el fertilizante a los ayuntamientos”.
Pero también recordó que Rosales Aguirre tuvo en 1995 una confrontación con el ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer.
“En 1995, antes de la masacre de Aguas Blancas, tuvimos una reunión con el entonces gobernador Rubén Figueroa, en la que también estuvo Apolinar Segueda Dorantes –dirigente de la Unión de Transportistas Democráticos (UTD)– donde Andrés Rosales cuestionó al ex gobernador sobre su lema de campaña que había sido caminando con el pueblo”.
Recordó que las críticas molestaron a Figueroa Alcocer, al grado que le dijo que “lo iba a matar, y le repitió: lo que digo lo cumplo”.

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