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La explosión en el edificio de Pemex fue un accidente, reitera la paraestatal

Abel Barajas y Alejandra López / Agencia Reforma

Ciudad de México

Petróleos Mexicanos afirmó ayer que la explosión del 31 de enero en el edificio B2 fue consecuencia de un accidente por fuga de gas, al mismo tiempo que la PGR prácticamente descartó que la acumulación del componente en el sótano haya sido intencional.
Emilio Lozoya, director de Pemex, y Alfredo Castillo Cervantes, subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo de la PGR, aseguraron ayer que el siniestro que cobró la vida de 37 personas no fue un atentado.
“En todo el complejo y en todas las instalaciones de Pemex se está haciendo un esfuerzo todavía adicional a nuestros protocolos. Como ya quedó claro, esto fue un accidente, una fuga de gas que pudo haber pasado en cualquier otro lugar, pero lamentablemente pasó en este edificio”, dijo Lozoya.
Entrevistado en el interior del complejo, cuando acudió a saludar al subprocurador, Lozoya señaló que se han tomado medidas adicionales para revisar los protocolos de seguridad de Pemex.
Cuando el subprocurador fue cuestionado sobre la afirmación de Lozoya, manifestó que si bien los dictámenes científicos tendrán la última palabra, es casi un hecho que no hubo la intención de acumular el gas en el sótano donde detonó la conflagración.
“El tema de la intencionalidad es parte del resultado final de los peritajes. La lógica nos dice que sería prácticamente imposible que de una manera dolosa se pudiera hacer un cálculo tal cual y pudiera tener el control sobre algunos puntos en específico para tener este objetivo y que además se tuviera conocimiento de la gente que estaba en el lugar cuando tenía que pasar”, afirmó Castillo.
“La lógica nos diría que no hay forma; sin embargo, con el peritaje final que digamos de dónde provino o cómo se acumuló, de qué manera se dio el nivel de explosividad y de más, lo va a dejar totalmente acreditado”.
El lunes, el procurador Jesús Murillo Karam dijo que aunque ya estaba clara la causa de la explosión, atribuida a una acumulación de gas en el sótano del edificio afectado, aún se investigaba si había sido accidental, intencional o un acto de negligencia.

Honran a víctimas

Trabajadores de Pemex guardaron un minuto de silencio en las oficinas centrales de la paraestatal, en memoria de los 37 fallecidos por la explosión del 31 de enero.
La directiva convocó a todas las personas presentes en los cuatro edificios que están operando en el complejo corporativo a que donde estuvieran se pusieran de pie y guardaran silencio por un minuto.
Este miércoles, Pemex reanudó sus actividades cotidianas luego de la explosión que colapsó la planta baja sobre el sótano del edificio B2.
Por esta razón, este edificio y su contiguo, el B1, no estarán en funciones hasta nuevo aviso y los trabajadores de estos dos inmuebles serán reubicados durante la semana.

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