Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Ya se interrogó a ocho personas por el ataque a las turistas españolas, dice el director de la PIM

Carlos Moreno A.

El director de la Policía Investi-gadora Ministerial (PIM), Marcos Esteban Juárez Escalera, informó que ocho personas fueron interrogadas “digamos con más intensidad”, por el caso de la agresión sexual que sufrieron seis turistas españolas, en cuyas investigaciones participa ya un grupo de la Procuraduría General de la Repú-blica (PGR). La madrugada del lunes, 12 turistas españoles y una mexicana fueron agredidos mientras descansaban en la casa de playa Badaje, ubicada en San Andrés Playa Encantada; allí seis hombres fueron amordazados mientras que seis mujeres fueron violadas por cinco hombres que portaban ar-mas cortas y tenían el rostro cubierto con paliacates. En una reunión que sostuvo el jefe policiaco en la casa de playa ubicada sobre la carretera a Barra Vieja, en el kilómetro 37, donde se suscitó el ataque, estuvieron también la titular de la PGJE, Martha Elva Garzón Bernal y los agentes de la PGR. El director de la PIM indicó, sin precisar nombres ni sexo que “ocho personas (han sido) interrogadas, digamos con más intensidad, pero hemos interrogado a cientos de personas, digamos que es gente que estuvo más cerca o que puede tener conocimiento más importante”. Pero aclaró que “no son detenidos” y que “ni siquiera (están) presentados, únicamente los estamos interrogando para ver qué saben del asunto”. “Queremos no detener nada más por detener, queremos tener pruebas bien, las cosas que se robaron, los tenis que se robaron, los teléfonos, las IPads, queremos encontrar todo bien, que no quede duda”, manifestó el director de la PIM. Dijo que se han realizado “excelentes trabajos periciales” y que si “encontramos a la gente adecuada con las pruebas que tenemos de periciales, tiene que cuadrar”. Por separado, la procuradora Garzón Bernal explicó que la presencia de los agentes y de ella en la casa de playa fue para realizar diligencias sobre la agresión. Antes de retirarse aseguró que ya habían realizado las correspondientes, y pidió “que esperen un poco y que me permitan, que cuando ya tengamos algo que dar cuenta a ustedes entonces yo saldré al aire”. Garzón Bernal reiteró que hay “por ahí hay algunos indicios y unas cuestiones pero no puedo darlos a conocer”, e insistió en que se debe de entender que está obligada a “guardar la secrecía, una cosa que yo diga, una cosa y nos echan abajo la investigación”. Mantienen los retenes Un día después de que la Cancillería mexicana informó que la investigación del caso era responsabilidad del ámbito local, la PGR se incorporó a los trabajos de investigación y ayer los agentes federales participaron en una reunión en la casa donde ocurrieron los hechos ayer a las 3 de la tarde se reunieron la titular de la PGJE. Allí tuvieron una junta en la mesa del jardín de la parte posterior de la casa que da a la playa. Se supo que esta junta fue para definir las acciones a realizar sobre el caso y las líneas a seguir, asimismo que acudieron para revisar la casa e interrogar vecinos y observar lo ocurrido. Se supo que los agentes de la PGR realizaron recorridos por las zonas cercanas a la casa de playa, y sobre la carretera, así como negocios y vecinos del lugar. Por la mañana, camionetas de la Policía Ministerial y de los agentes de la PGR estaban en las instalaciones de la Fiscalía Regional en Acapulco, y se supo que también acudió el subprocurador de Control Regional y Procedimientos Penales, Joaquín Jesús Pérez Serrano. De acuerdo con fuentes de la PGJE, la investigación y vigilancia en torno al caso de los turistas españoles se extendió a la periferia del puerto, y que desde la madrugada del martes hubo movilizaciones policiacas en la colonia Arroyo Seco debido a los indicios, pero no se especificó si se busca a los sospechosos. Ayer por la tarde la casa de playa continuaba resguardada por agentes policiacos; había cuatro patrullas de la PIM con unos cinco policías, dos camionetas de La Marina con seis efectivos, quienes estaban situados afuera de la casa y otros sobre la carretera que revisaban los vehículos y pasajeros que circulaban por la zona, así como dos patrullas de la Policía Federal. La casa de playa ya se encontraba acordonada en su totalidad con una cinta amarilla de plástico donde se leía: “Escena del Crimen-PGJ”. El martes sólo la rodearon con una cinta del mismo color, pero le pusieron dos letreros escritos a mano en los que se leía: “no pasar, PGJE”. La puerta de madera, que es el acceso principal a la casa y que mide unos 5 metros, la acordonaron con la misma cinta de plástico, pues el martes olvidaron colocarla. También continuaban tirados en el pasto dos cojines de color café con crema En el lugar había reporteros de medios de comunicación locales, nacionales e internacionales como CNN, quienes se encontraban trasmitiendo en vivo y describiendo la agresión que sufrieron los turistas españoles, así como un helicóptero de otro medio de comunicación que sobrevolaba la zona de playa. Sobre ésta había policías federales y municipales que revisaron la zona a bordo de cuatrimotos, y los policías municipales iban con los rostros tapados y otros más realizaban recorridos a pie. Asimismo continuaban los retenes en la carretera nacional, en Barra Vieja, donde efectivos de la Marina pedían a los conductores que se bajaran y revisaban al interior de los carros.

468 ad