Más del 95 por ciento de los plantíos ilícitos que se siembran en Guerrero son de amapola, informa Rico Gámez

Zacarías Cervantes

Ojo de Agua, Heliodoro Castillo

Efectivos de la 35 Zona Militar detectaron cuando menos 60 plantíos de amapola en las inmediaciones de éste poblado y la mañana de ayer comenzaron su destrucción, encabezados por el comandante de esa zona militar, Juan Manuel Rico Gámez, quien llevó a la zona a reporteros de diversos medios de comunicación en un helicóptero.

En entrevista, el jefe militar informó que Guerrero es uno de los primeros lugares de producción de amapola y mariguana, a pesar del trabajo permanente de los militares en la destrucción de los cultivos.

Explicó que esto tiene que ver con la cultura del guerrerense y con la ausencia de políticas públicas para promover la siembra de cultivos lícitos como una alternativa para los campesinos de la entidad.

Los reporteros fueron convocados el jueves por la tarde para realizar un recorrido por el municipio de Ayutla, y trascendió que sería en la zona me’ phaa, donde la semana pasada la dirigencia de la Organización del Pueblo Indígena Me Phaa (OPIM), denunció la incursionaron de elementos del Ejército y que acamparon en una escuela secundaria, motivo por el cual se habían suspendido las clases.

De última hora se cambió el lugar de la destrucción de plantíos, incluso por la mañana, antes de partir hacia la Sierra del Filo Mayor, uno de los pilotos del helicóptero del gobierno del estado, que fue prestado a las autoridades militares para el traslado de los reporteros, expresó que ellos también habían recibido la información de que viajarían hacia Ayutla.

En Ojo de Agua, que se encuentra en lo alto de la sierra del municipio de Heliodoro Castillo, elementos del 50 Batallón de Infantería realizaron una demostración para los medios de comunicación dentro de un plantío de amapola, primero del reconocimiento del área, el aseguramiento y representaron un enfrentamiento.

Los mandos de la Base de Operaciones informaron al comandante de la 35 Zona Militar Rico Gámez, que en los 12 días que llevan en esta zona han encontrado cerca de esta comunidad por lo menos 60 plantíos de diferentes tamaños “y en diversas etapas de crecimiento y de desarrollo”, uno de ellos fue el que destruyeron la mañana de ayer, y en los próximos días continuarán con el resto.

Posteriormente, en entrevista, en la que el general y comandante de la 35 Zona Militar, no permitió otro tipo de preguntas que no fueran sobre el trabajo de la destrucción de plantíos de enervantes, informó que en lo que va del año han sido destruidos, en la jurisdicción que comprende la Novena Región Militar, 131 plantíos de mariguana con una superficie de 21 hectáreas y media, Mientras que de amapola 10 mil 542 plantíos con una superficie de un millón y media de hectáreas.

Lo que corresponde al área de la 35 Zona Militar, según datos de este mando castrense, en lo que va del año han sido destruidos 89 plantíos de mariguana con una extensión de 7 hectáreas mil 950 metros, y de amapola 9 mil 824 plantíos con una extensión de mil 415 hectáreas  y 7 mil 666 metros.

Rico Gámez reconoció que Guerrero sigue en los primeros lugares en la siembra de amapola y mariguana y que uno de los municipios de alta incidencia en la siembra de enervantes es el de Heliodoro Castillo.

“Ustedes pueden comprobar que sólo en esta área hay cerca de 60 plantíos por lo que el personal de la Base de Operaciones que trabaja aquí se llevaría de 6 a 8 días en las labores de destrucción”, dijo el militar.

Explicó que en Guerrero se cultiva más amapola que mariguana, puesto que aproximadamente del 95 al 96 por ciento de los plantíos que se destruyen son de la primer droga y el resto de mariguana.

Informó que casi no se realizan detenciones de los productores porque  regularmente “cuando notan nuestra presencia se retiran de las áreas de siembra y ya no encontramos a nadie”.

El jefe militar informó que el cultivo de enervantes “es un problema muy complejo” y que para su solución se requiere de darle a los campesinos oportunidades diferentes de siembra, con algunos cultivos que les proporcionen sus satisfactores y tratar de dejar la siembra de enervantes”.

También explicó que se trata de un asunto de cultura, pues dijo que “Guerrero ya tiene más de 60 años que se viene sembrando este tipo de cultivos y ya es una cultura  natural el sembrar este tipo de enervantes. Yo creo que el camino para tratar de revertir este problema es generar mejores condiciones de vida para las comunidades, que puedan tener cultivos que les permitan vivir”.

El jefe militar explicó que con el cambio de mandos por la entrada del nuevo gobierno no ha recibido ninguna instrucción en cuanto a su trabajo en contra del combate del narcotráfico, “la directiva sigue siendo la misma; trabajar en beneficio de los mexicanos, y el secretario (de la Defensa Nacional) conoce está área porque fue comandante de región y nos ha recomendado que trabajamos con mucho ahínco y que demos los resultados que la población quiere para su beneficio”.