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Jaime Castrejón Diez.

La historia de Hernán Cortés

El nuevo libro de Christian Duverger Crónica de la eternidad, hace un análisis de la historia de la conquista de México que se ha atribuido siempre a Bernal Díaz del Castillo. En la Sumaria Relación de Dorantes Carranza hay una lista de los distintos grupos de conquistadores, en ese documento lista a Bernal Díaz del Castillo  y dice: “…buen soldado y el historiador más sincero de la conquista”. Esta relación la hizo Baltazar Dorantes Carranza, el hijo de Andrés que junto con Alvar Núñez Cabeza de Vaca participó en la expedición de la Florida y estuvo en la Nueva España un tiempo en el que recopiló alguna información. La Relación la escribió su hijo en 1603, difícilmente se puede considerar que su información es de primera mano. La investigación se hizo analizando diversas fuentes y la única que se encontró fue la de esta relación.
Cortés ya había hecho fama de relator con sus Cartas de Relación a Carlos V. De hecho, tenía fama de buen cronista pues su segunda carta se publicó y se vendieron cuatro mil ejemplares. Había dos aspectos de su popularidad entre los conquistadores y algunos españoles, haber realizado la hazaña y repartido favores a sus soldados; por ello Carlos V tenía miedo que el nuevo continente se fuera a manos de los conquistadores. Tanto Francisco Pizarro como Cortés, que eran primos, habían construido barcos que navegaban por el Pacífico y había comunicación entre ellos. Carlos V trató de frenar a Cortés, mandó primero a la Audiencia y después estableció el Virreinato, siguiendo la costumbre de los reinos de Castilla y de León con la institución de la Merindad, con todo y los Juicios de Residencia para control de la Corona.
Cortés había establecido un astillero en Zacatula, porque quería seguir  descubriendo nuevas rutas a lo que el llamaba la Isla de la Especiería. Esto preocupaba al Emperador y el Virrey Don Antonio de Mendoza lo expulsó de ahí y estableció el astillero del virreinato. Cortés se fue de Zacatula y estableció su astillero cerca de Acapulco, en el llamado Puerto del Marqués. Después vinieron las acusaciones y las multas que obligaron a Cortés ir a España, donde encontró un ambiente muy hostil. Hay una leyenda que dice que Cortés trató de abordar al Emperador y cuando se acercó Carlos V preguntó ¿quién es este hombre? Cortés le dijo: “este hombre os ha dado más tierras que reinos os heredaron vuestros abuelos”. Poco después se prohibió publicar los escritos de Cortés y muchos de ellos se quemaron públicamente.
Se sabe que a su regreso a España se dedicó a reunirse en su casa de Valladolid con varias personas y se sabe que se hicieron documentos para recopilar los datos de la Conquista de México y que hizo un extenso archivo y comisionó a Francisco López de Gómara a escribir un relato sobre esos hechos. Este procedimiento fue tan elaborado para tener claro qué pasó realmente en la conquista de México; la complejidad del enfoque muestra que un soldado individualmente no pudo hacerlo.
Duverger hizo un examen exhaustivo de quienes participaron en la conquista y encontró que de entre los 500 soldados que vinieron con Cortés si 15 sabían leer y escribir eran muchos, encontró los nombres de 12 de ellos y entre ellos no estaba Bernal Díaz del Castillo. Se trata de una investigación que se tiene que hacer de manera indirecta, esto es buscar datos que comprueben o nieguen una tesis establecida.
Este tipo de investigaciones ha tomado importancia porque se han encontrado nuevas fuentes y el escrutinio de las personalidades ha sido importante como lo ha sido el caso de Shakespeare y otros personajes que han sido estudiados a profundidad. Desde otro punto de vista el trabajo de Duverger tiene importancia porque desacraliza historias y personajes aplicando criterios científicos. La historia no se debe hacer ni por decreto, ni por mantener la tradición o por capricho. Como una de las ciencias sociales debe estar sujeta al escrutinio y a modificaciones cuando haya nueva evidencia. Es un obra que se debe estudiar.

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