Descarrila un tren en Buenos Aires; 49 muertos y 600 heridos, el saldo

DPA

Buenos Aires

Al menos 49 personas murieron y otras 600 resultaron heridas ayer tras descarrilarse un tren en la estación de Once en Buenos Aires, una de las más importantes y concurridas de la capital argentina.
Tras horas de incertidumbre, fuentes oficiales confirmaron lo que se temía. “Hay 49 muertos”, señaló el comisario Néstor Rodríguez en base a informes del director del Sistema de Atención Médica de Emergencia de la Ciudad de Buenos Aires (SAME), Alberto Crescenti.
Fernando Sostre, portavoz de la Policía Federal, precisó entre los fallecidos hay 48 adultos y un menor de edad. “El choque más fuerte se produjo entre el primero y el segundo vagón, luego de impactar contra el freno hidráulico de la estación”, dijo.
Al menos 50 de los 600 heridos quedaron “en grave estado” y uno de ellos es un niño, afirmó Crescenti. “Hay de todo lo que uno se pueda imaginar: amputados, traumatismos varios”, describió el director del SAME, luego de dar por finalizado el operativo de rescate.
El secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, dijo que fue “un accidente muy grave” y estimó que en el tren viajaban entre mil 200 y mil 300 personas, aunque varios pasajeros señalaron que sería unos 2 mil, ya que ocurrió en las primeras horas de  hoy, uno de los momentos del día con mayor cantidad de usuarios.
El funcionario remarcó que el maquinista del tren tomó su primer servicio unos minutos antes del accidente y detalló que “el conductor, de 28 años, está en terapia intensiva y con una foja de servicios impecable”.
El accidente se convirtió en el tercero más grave en la historia ferroviaria del país, con la trágica coincidencia que también ocurrió en febrero. Por la cantidad de víctimas, la mayor catástrofe fue el 1 de febrero de 1970 en Benavídez, en la zona norte de la Conurbano Bonaerense, donde hubo 236 fallecidos. El 25 de febrero de 1978 un camión con acoplado chocó contra una formación y provocó 55 muertos.
El director de Defensa Civil, Daniel Russo, dijo que el trabajo para rescatar a las personas atrapadas “fue tremendo y angustiante”.
Las primeras versiones indicaron que el tren no pudo frenar al llegar a la terminal de Once e impactó contra el sistema de amortiguación del andén.
“El tren se quedó sin frenos, descarriló y chocó contra la estación, no contra otro tren”, contó Paula, una de las pasajeras, por radio Mitre.
Con la etiqueta “Once”, entre otras, el accidente ferroviario se convirtió en uno de los temas más comentados en la red social Twitter en Argentina, donde los usuarios pedían explicaciones a la empresa concesionaria y manifestaban su repudio hacia el Estado.
A raíz del accidente, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner suspendió la firma de un acuerdo con la Asociación de Corredores de Turismo Carretera (ACTC), prevista para esta tarde, para transmitir las carreras de autos a través de la Televisión Pública, según la agencia de noticias DyN.
El arzobispado de Buenos Aires expresó su “cercanía” a los familiares de las víctimas y elevó oraciones por “el eterno descanso de los difuntos”.
El dirigente de la Unión Ferroviaria Roberto Núñez denunció “falta de inversión” en los trenes por parte de la empresa concesionaria del ferrocarril Sarmiento y advirtió que esto tiene como consecuencia “irregularidades, deficiencias”.
“Hay falta de inversión, no se ha hecho lo que se tendría que hacer y hay algunas formaciones que son de la década del 60, 50”, alertó el dirigente sindical.
Los dirigentes gremiales Julio Piumato y Facundo Moyano apuntaron a la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) por “desidia” en la tragedia y al gobierno nacional por “falta de control estatal” al no prevenir el accidente, pese a antecedentes de mal funcionamiento de la línea Sarmiento denunciados por delegados de la Unión Ferroviaria.
TBA lamentó el grave accidente, envió sus condolencias a familiares de las víctimas, pero no logró establecer los motivos del siniestro.
El secretario de prensa del gremio La Fraternidad, que agrupa a los conductores de trenes, Horacio Caminos, sostuvo que formaciones ferroviarias como la que protagonizó el accidente, “en reiteradas oportunidades presentan deficiencias” y denunció que hay vagones que datan “de la década del 60”.
“Denunciamos desde hace tiempo sobre el nivel de desinversión y los trabajadores todos los días tienen que poner los trenes en condiciones para poder salir”, dijo Caminos.
El delegado de los trabajadores de la línea Sarmiento afiliados a la Unión Ferroviaria, Rubén Sobrero, aseguró que el tren accidentado “fue revisado anoche en el taller”.
“Esta formación salió ayer (martes) del taller. Todo lo que tiene que ver con el sistema de frenos lo habían revisado. Alguna falla debe haber habido, si no, es imposible un choque así. Es muy extraño este accidente”, aseguró Sobrero en declaraciones a radio La Red.
En otros accidentes similares ocurridos en los últimos años, el septiembre pasado, 11 personas murieron y más de 200 sufrieron heridas en un accidente ocurrido entre un ómnibus y dos trenes suburbanos en el barrio de Flores de la ciudad de Buenos Aires.
En este sentido, la diputada nacional por la Coalición Cívica (CC) Elisa Carrió afirmó que “la nueva tragedia” ocurrida ayer en Once “es el resultado de la corrupción de los gobernantes que apañan empresarios inescrupulosos y de jueces que no investigan ni condenan delitos”.