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Cuenta la Casa de Justicia de la CRAC en Espino Blanco, con 11 detenidos de alta peligrosidad, informan

Sergio Ferrer

Espino Blanco, Malinaltepec

Los coordinadores de la Casa de Justicia de Espino Blanco, municipio de Malinaltepec, integrada a la Policía Comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) informaron a las autoridades que los remplazaron que los alcaldes de los seis municipios donde tienen comunidades adheridas, se han retrasado o han negado el pago que dan al sistema de justicia comunitario.
Durante la reunión para la entrega recepción en el crucero de Espino Blanco en la rendición del informe se denunció que, aunque acudió a ofrecer su apoyo junto con el alcalde de Xalpatláhuac, Lorenzo de Jesús Brigido, el presidente municipal perredista de Malinaltepec, Aristóteles Alfredo Tito Arroyo ha retrasado dos meses su aportación de 60 mil pesos a la Policía Comunitaria.
El alcalde de Acatepec, Paulino Neri Juan, no ha respondido, el de Atlamajalcingo del Monte, Jorge Luis Espinobarros Galindo los citó y no llegó al lugar, el de Tlacoapa, Efrén Merino Sierra, aseguró que daría los recursos a mediados de febrero y aún no se concreta mientras que el alcalde de Tlapa, Victoriano Wences Real, dijo que pagaría la compostura de un vehículo y que le llevaran la factura pero después intentó dar sólo tres mil pesos, lo que uno de los coordinadores consideró que sería una burla porque ellos no estaban limosneando.
Las autoridades salientes manifestaron que ojalá con los nuevos coordinadores exista apoyo municipal porque a ellos les tocaron alcaldes como Willy Reyes “que odiaba a la Policía Comunitaria”.
Los coordinadores Claudio Carrasco y Moisés Figueroa recordaron que el ex coordinador Felipe Avilés se fue antes del término designado de tres años, y aseguraron que no son suficiente las aportaciones de los ayuntamientos, “ya lo verán cuando estén en funciones, entregamos todo por escrito, antes no se había hecho pero es verdad que se sufren carencias”, aseguró Figueroa.
También dijo que en una ocasión que les sobró dinero, lo pidieron en la Casa de Justicia de San Luis Acatlán porque se conoce como la sede principal, pero no lo entregaron y mejor lo ocuparon para el mantenimiento de un vehículo “el dinero es el diablo, hace pelear a la gente”, agregó Carrasco.
Para los que fueran coordinadores desde 2010 de  comunidades de Malinaltepec, Atlamajalcingo del Monte, Acatepec, Tlapa, fue difícil el cargo porque no hay días de descano ni de enfermedad, porque rápido les llegan los reclamos e incluso deben abandonar a su familia los que viven lejos o poner, en ocasiones, dinero de su bolsa.
Los ex coordinadores aceptaron que hubo errores importantes, no intencionales porque no son perfectos, pero les quedaron experiencias que les dejaron un amargo sabor en la boca. Informaron además que acudieron a foros a los que fueron invitados, realizaron labores de investigación de la Casa de Justicia y hubo salidas a Acapulco, Chilpancingo y el Distrito Federal.
Actualmente hay 26 comunidades pertenecientes a la CRAC aunque ya operan tres de Acatepec y Xochapa en el municipio de Alcozauca, pero su ingreso está pendientes.
En el acto en el cual se rindió cuenta del dinero administrado, se dijo que había deudas y se entregó la potestad de los bienes materiales a los coordinadores Nicasio Castro Agustín, Amador Cesario Rosales, Sulpicio Solano Cantú, Camerino Mendoza Galindo, dos personas del Comité Ejecutivo y los comandantes regionales, elegidos el 19 de febrero en una asamblea micro regional.
Los anteriores coordinadores atendieron 175 asuntos de justicia en tres años, hubo 59 reeducados, liberados 48 y fueron dejados en custodia  11 detenidos  de alta peligrosidad en reeducación. Hubo 13 órdenes de aprensión quedando 3 pendientes asimismo hubo para los comunitarios talleres de derechos humanos y minería.
Figueroa aseguró que en ocasiones sólo hay tortilla con salsa de molcajete pero comen lo mismo que los detenidos en reeducación y no reciben dinero de San Luis Acatlán, aunque allí llegan los recursos que ha dado el estado, pero a Espino Blanco en ocasiones sólo les llega gasolina.
“Allá abajo hay pelea porque en San Luis Acatlán entregó el gobierno medio millón y últimamente millón y medio pero nada de ese dinero ha llegado a las otras casas”, aseguró Figueroa por lo que los ex coordinadores abogaron por la unidad  en la CRAC.
Por otra parte se recordó a los coordinadores insistir en la construcción de la Casa de Justicia, ya que anteriormente se adhirieron al  Frente de Masas porque les dijeron que aceleraría el proceso lo cual no fue verdad pero tampoco Obra Pública estatal le toma seriedad al proyecto, porque aunque acudieron a medir al preguntarles sobre los avances dijeron que habían perdido los documentos.
Criticó el actuar “tibio” del funcionario de la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI), Bulmaro García por no continuar con la gestión de la construcción de la Casa de Justicia, que es de madera.
Los nuevos coordinadores pidieron tener cuidado sobre quiénes portan uniformes y no son de la Policía  Comunitaria como sucede en Cerro Timbre y en Tilapa donde hay gente con uniformes y radios.
Recordaron que del movimiento de autodefensa de Ayutla había quienes portaban uniformes como los de la Policía Comunitaria, pero en ocasiones se les notan diferencias en el logo, como en las camionetas donadas por el gobierno estatal se quitó el logo original de la CRAC y el lema “el respeto a nuestros derechos es justicia” y se cambió por el de “Una nueva forma de protección y seguridad comunitaria”.
En cuanto a la radio comunitaria La Voz de los Pueblos, se rindió informe de materiales y hubo un taller para procurar mejorar la radiodifusión comunitaria.

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