Instalaciones dañadas y muebles rotos, el panorama en las subestaciones de Bomberos

Mariana Labastida

Instalaciones eléctricas en mal estado, baños dañados, lavabos descompuestos, camas rotas, colchones viejos y equipo de combate de incendios incompleto, es como se encuentran las subestaciones de bomberos de El Coloso y Constituyentes, así como la de Farallón.
Los bomberos se quejaron de que les informaron de que tenían derecho al Infonavit, pero que ninguno ha podido acceder a ese crédito a la vivienda porque en el instituto les informó que no existe ningún convenio con el Ayuntamiento.
En una visita de El Sur a las instalaciones de la subestación de bomberos del Mercado Central, ubicada entre las calles 16 de Septiembre y Constituyentes, los apagafuego expusieron que la última vez que le hicieron un arreglo fue hace unos meses que repararon los lavabos, pero que por el material de mala calidad no perduró y se despegó de nuevo.
Esta es una de las dos subestaciones, junto con la de El Coloso, que les prometieron, durante el festejo del Bombero en 2010, que serían rehabilitadas, pero no ocurrió.
Desde la fachada se ve el descuido de la infraestructura pues la parte superior de la subestación está caída, además de que las lámparas del área que ocupan como gimnasio, donde sólo hay una pesa improvisada hecha con cemento y unos botes, no tienen focos y la base de los mismos están oxidadas y los cables a la vista, al igual que otros conexiones de la parte superior como en la estancia inferior.
La escalera de acceso a los dormitorios no está bien afianzada y en el cuarto donde están las camas, que tienen colchones viejos, las ventanas no tienen vidrios y una parte de las balastras se encuentra rota.
Los bomberos han tenido que llevar ventiladores de sus casas pues las autoridades no se los dieron.
Asimismo, los baños de la subestación del Mercado Central no tienen caja, el lavabo es sostenido por dos tubos y la regadera en malas condiciones. Los bomberos dijeron que los tubos fueron reparados pero que sólo solo duró unos meses debido a la mala calidad de los materiales.
El en caso de la subestación de El Coloso, la infraestructura no es diferente y una parte del estacionamiento donde se hicieron compartimentos para colocar los trajes se encuentra dañada, además de que la instalación eléctrica dejó de funcionar hace unos años debido a que se trasmina el agua en temporada de lluvia; “aquí parece regadera”, señaló uno de los bomberos y se dirigió al lugar donde debería ir un foco.
Esta estación fue construida en 2002, durante la administración de Zeferino Torreblanca, quien fue el último –según los bomberos– que le dio mantenimiento a todas las instalaciones de esa dependencia en Ciudad Renacimiento, Pie de la Cuesta, Mercado Central, El Coloso y Central.
Dijeron que tienen más de un año pidiendo que les reparen los baños que se encuentran tapados y las tuberías echadas a perder, sin que el gobierno municipal haya puesto atención a su demanda.
También expusieron que el delegado de la dependencia que tiene que supervisar y verificar las requisiciones que tengan nunca a visitado esa subestación.
Los bomberos de ambas estaciones se quejaron de que no todos tienen el equipo para combatir incendios; en El Coloso tienen máscaras y el tanque para introducirse a un sitio en llamas, sin embargo no les han comprado los arneses que ya se rompieron por el uso ni se han llenado de oxígeno que se requiere para utilizarlos.
En la estación Central, las camas siguen siendo las literas que les dieron hace más de 10 años y sólo algunos colchones fueron cambiados, asimismo las ventanas están flojas y los apagafuego temen que con un sismo se vayan a caer.
Allí no hay cocina aun cuando es uno de los requerimientos que han hecho.
La Central es el estacionamiento de todas las unidades que no sirven y ahí están las cinco ambulancias que tiene el municipio de las cuales sólo funcionan dos.
Los inconformes indicaron que por dos semanas no hubo camión para salir a los servicios y tuvieron que trasladar la motobomba de la estación El Coloso para ir a las alertas, debido a que no se liberaba el cheque para pagar la reparación del vehículo.
También de cinco pipas sólo sirven dos, y las donadas por PEMEX, que les dijeron que serían reparadas, solamente se pintaron, mientras que el camión con escalera no sale a urgencias porque aunque arranca no funcionan la sirena ni el sistema eléctrico, por lo que consideran los bomberos que no es utilizable.
En la central se repararon los baños que aun funcionan y se cambió la lámina del techo, la cual los bomberos preferirían que no hubieran hecho debido a que la que colocaron es delgada y tiene muchas goteras.
En las tres estaciones los bomberos se quejaron de que no les respetan la prestación de Infonavit a la que les dijeron que tienen derecho, debido a que algunos han preguntado en el instituto cómo acceder a él y cómo aplica el convenio que firmó el gobierno municipal, pero que allí les informaron que no existe tal convenio.
La primera ocasión en que los bomberos protestaron para exigir equipo y mejores instalaciones fue en marzo de 2009. Cinco días después fueron atendidos por el secretario general del Ayuntamiento, Vicente Trujillo Sandoval, quien les prometió, después de un recorrido por dos estaciones, que habría mejoras “poco a poco”.
Tres meses después, en junio de 2009, los bomberos entregaron al alcalde Manuel Añorve un documento con peticiones de motobombas, una de ellas de tanque rápido, dos ambulancias, 60 plazas, dos canastillas de rescate, 100 mangueras y remodelación de las instalaciones, entre otras como radios portátiles, carretas, motosierras, refrigeradores, motos acuáticas, lanchas, lámparas, equipo para incendios, uniformes que incluían botas y cascos.
En respuesta, los primeros días de julio el alcalde firmó un convenio con Infonavit para que los trabajadores contaran con dicha prestación, entre ellos los bomberos; un mes después en el festejo del Día del Bombero se les entregaron herramientas, motobombas y uniformes, pero no se mejoraron las instalaciones de los bomberos.
En el festejo del siguiente año, en agosto de 2010, el director de Protección Civil y Bomberos, Melquiades Olmedo Montes, prometió que en el 2011 se realizaría la rehabilitación de las subestaciones del Mercado Central y El Coloso; y que en enero de 2011 los bomberos se negaron a respaldar en su candidatura a gobernador a Añorve Baños debido a que dijeron no les había cumplido con la peticiones hechas.