Ruben Aguilar Valenzuela

El cónclave

Desde hace 2 mil años, la Iglesia católica elige al Papa en una reunión de obispos, que después pasó a ser de cardenales con derecho a votar, pero solo a partir de 1621, por decisión del papa Gregorio XV, la votación es secreta, para que éstos se sientan en libertad total a la hora de emitir su voto.
En la actualidad hay 203 cardenales, pero sólo van a votar 115, porque éstos al cumplir los 80 años pierden su derecho a elegir al Papa. En esta condición están 88 de los mismos. La edad promedio de los electores está por arriba de los 65 años.
La composición del colegio cardenalicio no corresponde al número de los católicos por regiones en el mundo. Europa, con el 25 por ciento, está claramente sobre representada y tiene 60 de los cardenales electores. De ellos son italianos 21, alemanes seis y  españoles cinco.
América Latina, que tiene casi el 50 por ciento de los  católicos del mundo, cuenta tan sólo con 19 cardenales. Estados Unidos, que ahora es la cuarta o quinta catolicidad a nivel mundial, la primera es Brasil y la segunda México, tiene 11 y Canadá tres.
En África y Asia hay 11 cardenales en cada una, para dar un total de 22. En estas regiones es donde el catolicismo crece de manera más acelerada hoy en día y en los países de Europa, con el mayor número de cardenales, es donde disminuye con mayor rapidez.
El Papa, que hace un año ya había tomado su decisión de dimitir como lo reveló su hermano mayor, que también es sacerdote, nombró el 6 de enero de 2012 a 22 nuevos cardenales, 16 de ellos europeos, cuatro de Estados Unidos y uno de Brasil. Así dejó armado al cónclave que elegiría a su sucesor.
Los cardenales con derecho a voto, al iniciar el cónclave, emiten un juramento por el cual se comprometen a votar secundum Deum (según la inspiración de Dios) que en los hechos implica que lo harán de acuerdo con su conciencia y sin presiones.
Los cardenales en este cónclave, que se dice inicia en 10 días, van a elegir al Papa 266 en la historia de la Iglesia católica. La norma exige que el elegido obtenga una mayoría de dos terceras más uno de los votos de sus pares, que para el caso es de 78 votos.
La tradición es que en el primer día de reunión sólo haya una votación. Si no hubo acuerdo en el segundo y tercer día hay cuatro votaciones diarias, dos por la mañana y dos por la tarde. Si después de tres días no hay acuerdo se da un día para la reflexión y luego se reanudan las votaciones hasta que se elija al Papa.
Todo indica que esta elección será muy rápida y no habrá de pasar los tres días. Esto porque no hay grandes diferencias teológicas al interior del colegio cardenalicio nombrado todo por Juan Pablo II y Benedicto XVI, pero también porque todos están presionados por la celebración de la Semana Santa que inicia el 25 de marzo.
Twitter: @RubenAguilar