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Padecen las mujeres en Atoyac las deficiencias en las políticas públicas alimentarias, denuncia colectivo de campesinas

Francisco Magaña

 

Atoyac

 

El Colectivo de Mujeres Campesinas (Comucan) presentó ayer en Atoyac, en el contexto del Día Internacional de la Mujer, el trabajo de investigación Construyendo la política alimentaria comunitaria desde una perspectiva de género y derechos humanos a través del Observatorio Municipal por el Derecho Humano a Alimentarse.

El trabajo tiene como objetivo el monitoreo de las políticas públicas y rendición de cuentas de los gobiernos para la realización del derecho de alimentarse, por lo que se hizo el trabajo a través de FIAN, organización internacional de derechos humanos que promueve y defiende el derecho a la alimentación.

FIAN es la primera organización internacional de derechos humanos que lucha por la realización del derecho a una alimentación adecuada, como prevé la Declaración Universal de Derechos Humanos y otros instrumentos internacionales de derechos humanos.

El trabajo de investigación lo realizó Leticia Correa durante tres años en 23 comunidades de Atoyac.  La investigadora dijo que se enfocaron en Oportunidades y aseguró que es un programa asistencial que no contribuye a la mejoría digna y autónoma.

Citó que en los casos de las mujeres que están solas debido a la migración de sus esposos “son las que sufren más para poder subsistir y dar alimentos a la familia”.

Lo anterior, explicó, es debido a que a las mujeres les es difícil participar en programas porque las tierras están a nombre de sus maridos y en muchos programas no aplica la participación de las mujeres.

Dijo que están pidiendo que se les apoye para legalizar sus tierras para reactivar la economía local y como derecho de alimentarse y ya no sean manipuladas con programas asistenciales, “exigen programas más productivos y no asistencialistas, ya que afecta la producción por lo que se está haciendo una declaración oral que será presentada en los organismos internacionales”.

Leticia Correa dijo que “uno de los resultados de las encuestas que levantamos, es que sólo un 10 por ciento de la población reconoció vivir violencia intrafamiliar, cuando la media nacional anda por el 40 por ciento, ésta es una situación de manipulación”.

Agregó que “la idea del observatorio municipal en Atoyac por el derecho a la alimentación es dar seguimiento a las políticas públicas, hacer un esfuerzo entre ciudadanos y gobierno para que los programas lleguen”.

La investigadora citó costumbres machistas que repercuten en la mala alimentación de la mujer en las comunidades y expuso que en la mayoría de los pueblos del municipio donde se hizo la investigación, la mujer come al último, de lo que dejan el esposo y los hijos y lo hace sola, sin la compañía de nadie.

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