No estaba acordado liberar edificios, responde la CETEG al gobierno

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El secretario general de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG), Gonzalo Juárez  Ocampo, denunció que el gobierno estatal pretende justificar la represión contra el movimiento magisterial rompiendo el diálogo luego del primer acercamiento, porque el jueves no entregaron los edificios públicos donde están en plantón.

Consideró que el rompimiento del parte del gobierno estatal sólo va a “tensar” más los movimientos en Chilpancingo y en las regiones del estado en contra de las reformas laboral y educativa, por las amenazas directas del secretario de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, quien reiteró que no se pagarán salarios a los maestros en paro y confirmó que existen órdenes de aprehensión contra militantes de la CETEG.

En ese sentido, Juárez Ocampo indicó que le han informado de 17 órdenes de aprehensión liberadas, que no han sido ejecutadas, al menos contra tres dirigentes, pero aclaró que en sus jornadas de lucha nadie es necesario, porque existe una dirigencia colectiva que puede dar continuidad si algunos son aprehendidos.

En conferencia de prensa y tras la publicación de la postura del gobierno –a través de Salgado Gómez en El Sur–, el líder sindical reveló que la relación con el gobierno estatal comenzó a ser problemática la tarde del jueves, cuando el secretario de Gobierno exigió la liberación del Palacio de Gobierno y del Congreso local.

Pero en consulta con las delegaciones sindicales, las bases decidieron mantener tomadas las oficinas, mientras alcanzaban los primeros acuerdos, y la reacción del gobierno fue el anuncio de la cancelación de la reunión del viernes.

Aunque la noche anterior dijeron que acudirían a la cita de ayer en la residencia oficial Casa Guerrero, por la mañana los maestros resolvieron que no tenía caso ante la difusión de la posición oficial, con lo que el gobierno estatal cerró el diálogo.

Reconoció que hay una interlocución con el senador Sofío Ramírez Hernández –al que invitó el gobernador—, quien les propuso la liberación de uno de los edificios o al menos del acceso del Palacio de Gobierno, pero tampoco fue aceptado por sus bases.

Para restablecer el diálogo, indicó que es necesario que no haya condicionamientos a los maestros y normalistas que participan en las acciones de protesta.

“El gobierno estatal y federal no aceptan que tengamos esta postura de dignidad, y aunque de palabra dice que quiere el diálogo, nuevamente Ángel Aguirre Rivero muestra el doble rostro de mentira y engaño, para decir que se suspende y se rompe el dialogo”, recriminó.

“No nos perdonan que estemos luchando por causas justas, quieren mandar un mensaje para que nadie haga acción alguna que pueda incomodarlos. Hoy creen que pueden implementar sus medidas y que nosotros las aceptemos sonrientes, que vamos a ir contentos al cadalso”, dijo Juárez Ocampo.

En la conferencia, el dirigente de la zona centro, Minervino Morán Hernández, denunció que quedó clara la estrategia del gobernador y del gobierno federal para disuadir a los movimientos sociales y magisteriales a través de la represión violenta.